¿Y quién paga mi pensión?

La seguridad social cerró el año 2015 con un déficit de 13.600 millones de euros. Para compensarlo, según publicaba hoy el diario CincoDías, haría falta crear unos 2,2 millones de empleos, que cotizaran la media del sistema, es decir, 1.783 euros brutos al mes. O sea, que para conseguir ese número de empleos y, además, cobrando de media ese sueldo, lo que necesitaríamos sería un milagro. La creación de empleo, que se está produciendo en España, no es ni será, a largo plazo, suficiente para paliar los gastos de la seguridad social. Y es que tendemos al envejecimiento. Un informe de la CEOE lo decía la pasada semana. El año que viene habrá más muertes que nacimientos y, en el año 2030, se habrá reducido el paro, pero no porque se esté creando más empleo, sino porque habrá menos gente trabajando. No hay niños y sí muchos ancianos. Esos niños que ahora ocupan las escuelas y que más tarde llegarán al mercado laboral serán los que paguen la pensión de los que ahora estamos en este tramo de los 35 a 50 años. Mi pensión ya será un 20% más baja que la que ahora están recibiendo mis padres. Y desde luego, algo hay que hacer. No podemos postergar un debate que hay que abordar con responsabilidad y seriedad, porque una población envejecida cambia los hábitos de vida y, por desgracia, es a lo que tendemos. Utiliza mucho más los servicios sanitarios y asistenciales. No consume. Una población mayor gasta poco. Por regla general compran mucho menos que la gente joven. No conduce. Podríamos encontrarnos con una sociedad que se apaga lentamente, y como tendemos a dejarlo todo para el final, sería conveniente que, una vez que finalmente se conforme el Gobierno, se abra un verdadero debate sobre el sistema de pensiones que queremos. Si el actual, en el que los trabajadores son los que costean las pensiones de los jubilados o, uno compensatorio, donde el Estado puede fijar una pensión mínima para todos, pero que después ésta pueda ser compensada con un buen plan de jubilición privado, donde estrarían en juego en todo este entramado las compañías de seguro. Desde luego, dado que los jóvenes no están por la labor de tener muchos hijos, lo urgente es que administración y agentes sociales se pongan de acuerdo por un gran pacto nacional de pensiones, porque el tiempo pasa rápido. ¿Y quién pagará entonces mi pensión?

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