Se llama Udra, igual que un pequeño cabo que se encuentra en Pontevedra, Galicia, que está considerado un paraíso en medio de la naturaleza. Además de ser la hija de Elvis y Marilyn, es la primera cría de tiburón cebra que nace en Loro Parque.
Su nacimiento fue un logro del equipo de profesionales del acuario, que no solo controló la evolución del huevo durante meses, sino que también decidió practicarle una cesárea a Marilyn al cumplirse el tiempo de desarrollo embrionario y comprobar con una linterna que ya no tenía vitelo.
Lo cortaron con tijera, “a saco y con mucha velocidad, porque había que ayudarla a salir”, explica la conservadora del acuario, Ester Alonso. Fue ella la responsable de acometer este trabajo, acompañada del resto de sus compañeros y del veterinario. De haber sucedido en el medio natural, la pequeña cría no hubiese sobrevivido porque el huevo se hubiese podrido o lo habrían devorado los peces, ya que es un alimento que contiene mucha proteína.
En el acuario de Loro Parque hay dos parejas de tiburones cebras (Stegostoma fasciatum), Elvis y Marilyn, y Betty Boop y Frank Sinatra, que están bastante controladas y por eso saben quiénes son los progenitores de Udra.
Marilyn es madre primeriza, lleva dos años poniendo huevos que no fecundan porque es muy joven. Tras varios intentos lograron rescatar dos. En uno de ellos estaba la pequeña cría y el otro debería eclosionar en abril del próximo año, según los cálculos.
La mamá puso los huevos en mayo y la bebé nació el 24 de octubre. Pesó 72 gramos y midió 27 centímetros. Los responsables del acuario decidieron esperar unos días antes de comunicar la buena nueva para ver su evolución. Pasado este tiempo, confirman que la pequeña se encuentra en perfecto estado de salud y nada en su pequeño estanque, donde permanecerá hasta que el espacio limite sus movimientos.
Cuando eso ocurra, será trasladada a otro mayor, también con las condiciones adecuadas, dado que es necesario esperar hasta un año para que pueda convivir con el resto de especies. “No se puede introducir con animales que compitan en dieta ni meterla en el medio con otros porque físicamente todavía no tiene tamaño”, explica Ester Alonso.
Lo único que diferencia a Udra de sus padres son las rayas, que además dan origen al nombre por el que es conocido: tiburón cebra, pero que se transforman en puntos cuando llegan a adultos.
Esta especie tiene una cabeza ancha y aplanada, con la boca en posición ventral, que le permite escarbar los fondos en busca de pequeños animalitos. La cola ocupa casi la mitad de su longitud total y tiene unos poderosos músculos laterales. Es un animal bentónico, es decir, que se pasa largas temporadas en el fondo, además de ser un nadador bastante lento, pero escurridizo. No persigue a sus presas, solo las arrincona en pequeños espacios y usa su gran cuerpo flexible para evitar que puedan escapar. Su mandíbula se encuentra en la parte ventral de su cabeza, y tiene la característica especial de poder ser retractada hacia el interior. Cuando coloca su mandíbula en esa forma logra nadar a mayor velocidad y escapar de sus depredadores.
Cuidados
Como cualquier recién nacido, está lleno de cuidados. La alimentan a través de una pinza transparente para que no vea nada extraño y su dieta es muy estricta, no debe superar el 4% de su peso corporal. Está compuesta por pequeños trozos de langostino, mejillón, merluza y chipirón.
El equipo del acuario realizó un trabajo minucioso desde el momento en que logró rescatar el huevo. Controló la paramétrica del agua, la química, el estado del embrión, y ahora apunta sus comidas y la evolución de su peso. Pero, sobre todas las cosas, disfruta del crecimiento de la pequeña benjamina del acuario.
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