A última hora de la noche de ayer se confirmó la noticia más esperada por la gastronomía canaria. Juan Carlos Padrón, del restaurante El Rincón de Juan Carlos, en Los Gigantes (Santiago del Teide), fue designado Chef del Futuro 2017 por la Academia Internacional de Gastronomía, que se reunió en París para otorgar los galardones que concede anualmente a aquellas personas e instituciones a nivel internacional en pro de la cocina y la alimentación.
Este premio, que hasta ahora no lo ha recibido ningún cocinero canario, ha reconocido anteriormente a chefs españoles de prestigio como Martín Berasategui, Albert Adrià, David Muñoz, Jordi Cruz o Ángel León por sus aportaciones a la vanguardia del mundo de la gastronomía. Juan Carlos Padrón vivió ayer una jornada intensa, de nervios, pendiente de esta decisión que conoció a última hora. Esto no impidió que, junto con su hermano Jonathan aprovechara el día de cierre del restaurante para seguir investigando en su pequeña cocina, en busca de nuevos sabores, texturas y contrastes.
“Nosotros somos solamente cocineros y esto es lo que queremos seguir siendo. Este galardón hace historia en Canarias”, manifestó el chef tras conocer la noticia que le comunicó José Luis Zubieta, presidente de la Academia de Gastronomía de Tenerife, por encargo de Rafael Ansón, presidente de la Real Academia de Gastronomía y presidente de honor de la Internacional.
“Este reconocimiento es muy importante. No me lo esperaba. Voy a celebrarlo con mi familia”, que ha sido partícipe de este proyecto de El Rincón de Juan Carlos, que comenzó hace ya 14 años. “Es un premio a un trabajo duro, con penalidades, enormes sacrificios, muchas horas de dedicación, en las que han estado siempre presentes mi hermano Jonathan, las mujeres de ambos, María José y Raquel, y mi madre, Ina León”, relató emocionado.
El Rincón de Juan Carlos vivirá un antes y un después con este reconocimiento gastronómico. Pero Juan Carlos insiste: “Nosotros lo que queremos hacer es cocinar, es lo que nos gusta, y es lo que vamos a seguir haciendo”. Esta familia cuyos orígenes comenzaron en la playa de San Marcos en Icod de los Vinos, aunque pronto se trasladaron a Los Gigantes, vive ahora momentos de felicidad y de mirada serena al futuro. Una estrella Michelin, dos soles de la Guía Repsol han ido jalonando el camino hasta lograr este reconocimiento internacional.
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