La Palma lleva más de 5 años sin inspector fitosanitario

La Palma lleva más de cinco años sin contar con un inspector fitosanitario en la Isla. Los controles a la entrada de las mercancías, tanto al puerto como al aeropuerto, lo realizan técnicos que se desplazan con cierta periodicidad desde Tenerife, mientras la plaza existente para la Isla no se ha cubierto desde el año 2011. Un situación que continúa sin corregirse, a pesar de que son múltiples las demandas que se han realizado en este sentido desde las instituciones públicas, dado el riesgo que representa para la entrada de plagas y enfermedades vegetales, amenazando tanto al sector agrícola como la biodiversidad insular.

El empresariado palmero está preocupado también con esta situación, que mantiene a la Isla en una estado de cierta indefensión. “Es inconcebible que el Gobierno de España no haya cubierto esta plaza tan vital para un territorio insular, cuya puerta de entrada son el puerto y también el aeropuerto, por donde se puede colar cualquier plaga que suponga un riesgo para nuestra agricultura”.

Así lo manifestó el presidente de Cepyme La Palma, Tomás Barreto, que a pesar de que comprende que se hayan producido recortes por parte del Gobierno central para ajustar la situación económica derivada de la crisis, no entiende que no se haya dotado este puesto “tan vital” para una isla, que depende del Ministerio de Agricultura.

Una amenaza para la agricultura y el ecosistema insular, que además representa un perjuicio económico para las arcas públicas. Valga como ejemplo la inversión millonaria que se ha realizado en La Palma para tratar de atajar, sin éxito, la planta conocida como rabo de gato.

Por otra parte, el empresariado palmero, en coordinación con la Autoridad Portuaria, están tratando de encontrar una solución al sobrecoste de las tasas que pagan en Punto de Inspección Fronterizo, y que son cinco vez más caras que las que se abonan en Tenerife o Gran Canaria.

Barreto señaló que la solución pasa porque las propias empresas de transporte de mercancías se hagan cargo de la gestión de estas instalaciones, lo que reduciría el coste de mantemiento y equipararía las que se están pagando en los puertos de las islas capitalinas.