El otro gran atasco del Sur

Es un atasco del que apenas se habla, probablemente eclipsado por los graves problemas de tráfico que soportan miles de automovilistas en la autopista del Sur, pero lo que ocurre cada día en la única vía costera que comunica Santiago del Teide y Guía de Isora comienza a agotar la paciencia de los usuarios, que a diario tienen que soportar colas kilométricas a su paso por el pueblo de Alcalá.

La preocupación es tal que los dos ayuntamientos han aprobado sendas mociones para pedir que se ejecuten cuanto antes las obras de circunvalación que eviten que todo el tráfico, que ha llegado a alcanzar los 30.000 coches diarios, desemboque en el núcleo isorano. “Tenemos un grave problema de tráfico en una travesía que se ha convertido en una calle interior de Alcalá, porque toda la circulación por la costa entre los dos municipios se realiza por aquí”, señala Pedro Martín, alcalde Guía de Isora. “El problema es que cualquier avería, un coche mal aparcado o simplemente un peatón cruzando se convierten en pequeñas interrupciones que generan largas colas”, explica el mandatario sureño, que recuerda que esta carretera es una de las de mayor densidad de tráfico no solo del Sur, sino de toda la Isla.

Martín, que considera que la circunvalación es “más que una necesidad”, explica que el Plan General del municipio no contempla edificaciones en la parte alta de Alcalá para posibilitar, precisamente, la construcción en el futuro de la nueva vía. Mientras, Emilio Navarro, alcalde de Santiago del Teide, considera que es un “problema que se veía venir y al que no se le ha puesto remedio”. El regidor subraya que con la apertura del ramal de Fonsalía el tráfico en la TF-47 ha aumentado, “llegando a situaciones de colapso”. Además, advierte de que con la próxima construcción de nuevos hoteles y el futuro puerto de Fonsalía se producirá un efecto “denostable” para residentes y turistas.

Cortesía del Ayuntamiento de Guía de Isora

El Cabildo estudia medidas para paliar el caos circulatorio

El alcalde de Guía de Isora anunció que el Cabildo trabaja en un proyecto para modificar el ancho de las aceras, la distribución de aparcamientos y reducir los cambios de sentido, que es una de las principales causas que provocan las largas colas. La medida busca que se produzcan los menores parones posibles en el casco de Alcalá.