Científicos del Involcan certifican la crisis sismovolcánica del volcán Taal

Estos resultados han sido recientemente publicados en la revista científica internacional 'Journal of the Geological Society'
Foto CEDIDA

Los resultados de investigaciones lideradas por el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), entidad dependiente del Cabildo de Tenerife, y en la que han participado científicos del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), el Instituto Filipino de Volcanología y Sismología (PHIVOLCS), el Instituto Geológico y Minero de España (IGME), la Universidad de Tokio y la Universidad de Wessleyan (USA), reflejan que los cambios registrados en la composición química e isotópica de las aguas de la laguna cratérica del volcán Taal, así como los registros hidroacústicos realizados, son consecuencia de un proceso de inyección de fluidos magmáticos en el fondo de la laguna cratérica.

Estos resultados han sido recientemente publicados en la revista científica internacional ‘Journal of the Geological Society’ que edita la Sociedad Geológica de Londres (GSL), informa el Cabildo en una nota.

Los cambios observados en la composición química e isotópica de las aguas de la laguna cratérica del volcán Taal durante el período de 2010-11 parecen estar ligados a la inyección de fluidos magmáticos ácidos ricos en dióxido de carbono (CO2) y dióxido de azufre (SO2) en el fondo de la laguna cratérica. y a un aumento significativo de la sismicidad registrada en el volcán Taal.

Estas observaciones hidrogeoquímicas son totalmente congruentes con el registro de un pulso de emisión difusa de dióxido de carbono (CO2) en la laguna cratérica del Taal un mes antes del comienzo del incremento en la actividad sísmica registrada ‘PHIVOLCS‘.

Estos cambios físicos, químicos e isotópicos están relacionados con variaciones de la presión del sistema magmático-hidrotermal en profundidad, pudiendo haber producido fracturas en la capa de roca impermeable que lo rodea, facilitando la inyección de fluidos procedentes del reservorio magmático-hidrotermal.

El estudio hidroacústico realizado corrobora este proceso a través de la detección de numerosas plumas o penachos subacuáticos de gases volcánicos en el fondo de la laguna cratérica, siendo una evidencia del alto nivel de desgasificación al que está sometido la laguna cratérica del volcán Taal uno de los dieciséis Volcanes de la Década por Naciones Unidas y la Asociación Internacional de Volcanología y Química del Interior de la Tierra (IAVCEI), con la finalidad de promover estudios destinados a la prevención de futuros desastres naturales relacionados con el fenómeno volcánico.

MONITORIZACIÓN DE LA DESGASIFICACIÓN

Por lo tanto, la monitorización de la tasa de desgasificación subacuática y los cambios en la composición química e isotópica de las aguas de la laguna cráterica del Taal contribuyen a la mejora de la vigilancia volcánica de este sistema volcánico activo y otros similares que cuentan con lagunas cratéricas, así como a un mejor conocimiento de los procesos de desgasificación de la cámara magmática subyacente al sistema hidrotermal.

El desarrollo de este trabajo de cooperación científica ha sido posible gracias al proyecto ‘Fortalecimiento del sistema de alerta temprana sobre el fenómeno volcánico en Filipinas’ (08-CAP2-1202) co-financiado por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación del Gobierno de España.

TENERIFE REGISTRÓ HASTA 92 MICROSISMOS

R. HERRERA / T. FUMERO

El Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) informó el domingo de que desde el mediodía se había registrado un importante repunte de actividad sísmica en Tenerife, concretamente seísmos de muy baja intensidad o microsismos, que concuerdan con aquellos que se producen en volcanes activos.

En conversación telefónica con este periódico, el director de Involcan, Nemesio Pérez, explicó que dar por hecho que este enjambre es el preludio de una erupción resulta una “conjetura demasiado atrevida”, a la par que no hay motivo para alarmar a la población.

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