Primero mató a su pareja sentimental, luego intentó ocultar su cadáver y terminó por derrumbarse y acudir a una comisaría del Cuerpo Nacional de Policía para confesar su crimen y desvelar dónde podrían hallar el cuerpo sin vida de la infortunada mujer. Es el esquemático resumen del crimen que le ha costado la vida a una nueva víctima de la violencia machista, uno de los problemas más acuciantes que sufre la seguridad ciudadana de este país.
Los hechos se produjeron en la tarde de ayer, poco después de que se supiera lo acaecido tras entregarse el responsable, un varón de 34 años vecino del municipio grancanario de Telde.
La víctima es una mujer de 23 años de edad y, tal y como dijo su asesino confeso, fue localizada en el interior del maletero de su coche. Su cadáver estaba envuelto en cinta de embalar, según informaron a Europa Press fuentes de la investigación, lo que podría suponer un claro indicio de que la primera intención del criminal era desaparecer el cuerpo y simular que la joven había desaparecido. El vehículo en cuestión fue hallado en la zona de Lomo Magullo, en Llanos de la Palma, en el mismo término municipal de Gran Canaria.
A ese lugar se desplazaron sanitarios en una ambulancia medicalizada del Servicio de Urgencias Canario (SUC), pero únicamente pudieron confirmar el fallecimiento de la mujer. El hombre, que lógicamente fue detenido de inmediato, guardaba algún tipo de relación sentimental con la mujer asesinada, aunque los pormenores del caso se conocerán desde que empiecen a llegar los resultados de la investigación abierta por parte de los especialistas del Grupo de Homicidios de la Jefatura de Canarias de la Policía Nacional en el Archipiélago.
La noticia causó gran consternación ayer en las Islas en general, y en la ciudad de Telde en particular.
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