La Universidad de La Laguna (ULL) deberá pagar cuatro millones de euros por la expropiación de una finca en Geneto, cuyo suelo estaba catalogado como de uso universitario. Así lo anunció ayer el rector del centro académico, Antonio Martinón, durante la celebración del claustro. El responsable máximo de la ULL precisó que se trata de una resolución del Tribunal Supremo (TS) que fue recibida por la institución académica el 7 de abril. Ahora, los servicios jurídicos y algunos catedráticos de Derecho de la Universidad están analizando la sentencia, con el fin de valorar la posibilidad de presentar recursos, aunque el rector señaló que, en principio, no es posible recurrir.
Al parecer, en su momento, el Ayuntamiento de La Laguna negoció la expropiación del suelo con su propietario; los terrenos estaban catalogados como de uso universitario en el Plan General de Ordenación de La Laguna, y el Ayuntamiento procedió a este trámite. Tras esta actuación, el Consistorio lagunero llevó a los tribunales al Gobierno de Canarias y a la ULL para reclamar el importe oportuno (abonado al titular), y el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) falló a favor de que fuera el Ejecutivo regional el responsable de afrontar esa cuantía. No obstante, el TS, tras un recurso de la Comunidad Autónoma, ha determinado que es la Institución universitaria la que tiene que hacer frente al desembolso.
Durante su discurso, el máximo responsable de la ULL recordó que el pasado año la institución tuvo que realizar un esfuerzo en la asignación de recursos para hacer frente al pago de diversas obligaciones derivadas de reclamaciones de procedimientos de contratación por un total de 647.000 euros. En concreto, 200.000 euros para la empresa responsable de las obras de la Facultad de Periodismo, y el resto para la facultad de Bellas Artes. No obstante, Martinón precisó que todos estos procedimientos, tanto los de 2016 como los del presente año, se deben a actuaciones fechadas con anterioridad al presente mandato.
Aun así, Martinón precisó que el centro universitario y el Ayuntamiento de La Laguna acordaron que la institución queda exenta del pago del IBI, lo que supone anular un abono superior a los 10 millones de euros en los próximos años.
El rector dio cuenta de las principales actuaciones llevadas a cabo por la Universidad el pasado ejercicio, y las líneas marcadas para ejecutar a partir de los próximos años.
Acuerdos estratégicos
Antonio Martinón abogó por alcanzar acuerdos estratégicos, a largo plazo, por todos los miembros del claustro, que permitan mantener una visión de futuro y marcar una hoja de ruta, independientemente del responsable que esté al frente de la Universidad. En concreto, el rector señaló que, a su juicio, seis son los asuntos sobre los que debería versar este entendimiento. En primer lugar, señaló las titulaciones que se han de impartir, bajo la bandera de la formación y no tanto con criterios meramente de empleabilidad. Abogó también por llegar a un consenso sobre la mejora del rendimiento escolar, en el aumento de las plantillas de profesorado y de personal de administración y servicios (PAS) y en la elaboración de los nuevos estatutos, “que llevan 10 años de retraso”. Por último, citó la negociación en cuanto a la financiación para la ULL, que en estos momentos se lleva a cabo con el Gobierno de Canarias y la Universidad de Las Palmas, y la inversión en las nuevas infraestructuras. En este punto, indicó que, a su juicio, la prioridad es la Facultad de Informática, seguida por Educación y Ciencias de la Salud.
Entre las actuaciones de futuro previstas se halla consolidar la presencia de la ULL en La Palma y en el sur de Tenerife, al igual que implantar los títulos de grado de Motricidad Humana y Nutrición y avanzar en propuestas de dobles títulos, lo mismo que otra serie de máster en inglés y uno en Vulcanología. Asimismo, se mostró preocupado por el hecho de que la media de estudiantes de la ULL es inferior que en el resto del país -dato que es aún más bajo en el caso de los máster-, al igual que por la tasa de rendimiento, que, aunque ha crecido, sigue estando a la cola del Estado.
En cuanto a las acciones futuras del profesorado, el rector abogó por que las horas de docencia se asignen por interés formativo y no por otros criterios, como la antigüedad, y por atraer profesorado de otras universidades. En este sentido, destacó también el aumento de fondos captados el pasado año para proyectos de investigación, y anunció una serie de medidas para ejecutar, de cara al futuro, entre las que se encuentra el reconocer a María de Maeztu dando su nombre a un centro en el ámbito de la biomedicina, disponer de 100 contratos predoctorales antes de 2019 o el impulso a los contratos Ramón y Cajal y Viera y Clavijo.
El responsable de la ULL señaló, como otros de sus objetivos a medio y largo plazo, mejorar la transferencia a la sociedad. Dentro de este apartado se encuentran actuaciones como aumentar la celebración de debates ULL Opina y llevar estas acciones fuera de las instalaciones académicas, potenciar las actuaciones de patrocinio y mecenazgo, al igual que el programa de voluntariado ULL Solidaria.
Del mismo modo, la Universidad pretende realizar cursos de extensión universitaria, como ya se lleva a cabo en Adeje, Arona o La Gomera, en las tres cuartas partes de los municipios de Tenerife y en todas las islas del Archipiélago. Además, junto con el Ayuntamiento de La Laguna, se va a crear el premio Elías Serra de investigación en historia y patrimonio histórico. Asimismo, anunció la separación administrativa de las facultades de Farmacia y Psicología, de Ciencias de la Salud, y de Bellas Artes, de Humanidades.
Entre las demandas de los grupos claustrales se encuentra mantener las convocatorias de exámenes en septiembre o el aumento de la investigación y la internalización.
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