“Se hace complicado mantener el pacto sin confianza mutua; trabajamos con el PSOE, no para el PSOE”

Se estrenó en política en este mandato y ha asumido la portavocía del Grupo Municipal de Coalición Canaria (CC) en Candelaria, tras la renuncia de Nazaret Díaz, para hacer posible el pacto de gobierno con los socialistas

Se estrenó en política en este mandato y ha asumido la portavocía del Grupo Municipal de Coalición Canaria (CC) en Candelaria, tras la renuncia de Nazaret Díaz, para hacer posible el pacto de gobierno con los socialistas. Carlos Sabina lleva nueve concejalías tras asumir las de Romen Mantecón y Vaitiare Rodríguez, los dos ediles a los que la alcaldesa, Mari Brito (PSOE), echó del Gobierno por deslealtad y no piensa reintegrar pese al órdago de los nacionalistas, pendientes de lo que diga el comité local para saber si mantienen el pacto con el PSOE o lo rompen.

-¿Se puede mantener un pacto sin confianza entre los que lo componen?
“Se hace complicado si no hay confianza mutua. Ahora toca pulir las diferencias, si estas son pulibles, porque nosotros estamos por la labor de mantener el pacto, pero insistiendo en que CC debe tener cinco ediles en el Gobierno, no solo dos”.

-¿La solución pasa porque esos dos concejales expulsados renuncien a su acta?
“Cualquier solución pasa por lo que decida el comité local. Lo que no vamos a hacer es lo que nos diga el Partido Socialista, sino lo que decida Coalición Canaria”.

-¿Y cuándo se reúne el comité local?
“Lo hemos retrasado porque Efraín Medina estaba de viaje, por lo que creo que antes de final de mes se reunirá el comité”.

-¿Y, mientras tanto, se puede trabajar en el Ayuntamiento con la desconfianza entre los socios de gobierno?
“El PSOE tiene que entender que estamos gobernando bajo un pacto, por mucho que estuviera acostumbrado a hacerlo en mayoría en estos últimos 15 años. Ahora toca cambiar el panorama y lo que deben tener claro es que nosotros no gobernamos para Mari Brito, gobernamos con Mari Brito. En un pacto tiene que haber mucho más consenso y dialogo, donde cada uno de los socios tenga su peso y su espacio”.

-¿Es normal que una persona sola, como es su caso, lleve la gestión de nueve concejalías?
“No. Este es un asunto que hay que solucionar, porque CC firmó un pacto con cinco ediles y no con tres, por eso exigimos ese cumplimiento, no podemos seguir con tres concejales dentro y dos fuera”.

-Pero lo que ha manifestado Mari Brito es que no solo ha perdido la confianza en esos dos concejales, sino en Coalición Canaria.
“Entiendo que si esa es su explicación le toca a ella decidir qué quiere hacer. Insistimos en mantener un pacto de ocho concejales socialistas y cinco nacionalistas. Ella dijo que para readmitir a los dos ediles se tenían que dar las circunstancias y han pasado seis meses y comenta que no los va a readmitir. Estamos para trabajar por el pueblo y para trabajar con el PSOE, no para el PSOE”.

-¿Creen que al menos se podría recuperar la plaza de Romen Mantecón, que ha perdido perdón por aquel voto en contra del Gobierno?
“Eso habría que preguntárselo a la alcaldesa. Es verdad que no solo se rompió la disciplina del Gobierno, sino también la de un acuerdo adoptado en el comité local de Coalición Canaria”.

-¿Y por qué no fueron expedientados por el propio comité?
“El mismo día que pasó eso yo le dije a Mari Brito que esa situación no estaba prevista en el pacto y que esperara un tiempo porque esas dos personas tenían que dar explicaciones al comité porque votaron algo en contra de los que decidió el comité. A la alcaldesa se le pide que espere, se lo piden Nazaret, Efraín, desde Santa Cruz, se lo pido yo, que nosotros tenemos que arreglar ese problema en nuestro comité que se reúne tres días más tarde, que esa indisciplina la arreglamos nosotros. En este caso lo que hace es al revés, los echa a la calle, les quita las competencias, sin esperar la opinión de nuestro comité. En ese comité se iba a llevar la apertura de un expediente y se queda sobre la mesa, pero se advierte de que cualquier otra indisciplina en el voto significaría la expulsión inmediata del partido. Yo creo que quitarles las competencias a los dos concejales sin oír nuestra voz ha sido el gran error de Mari Brito”.

-¿Qué cree que va a hacer ahora el comité?
“No lo sé. El comité ahora mismo está un poco molesto y es normal, porque después de seis meses la alcaldesa ha dicho que no les va a devolver a esos dos concejales las competencias”.

-Ustedes, CC, en el último pleno han tensado aún más la cuerda con una abstención en otra moción de Bajo la Cuesta y el anuncio de un voto a favor de otra propuesta sobre Epelcan, ¿o me equivoco?
“Nosotros nos abstuvimos en la moción sobre declarar de emergencia las obras en Bajo la Cuesta, porque el informe del secretario llegó media hora antes, y no podíamos votar a favor o en contra porque no lo habíamos consensuado. En la moción de Epelcan también estábamos pendientes de conocer las consecuencias que tendría votar a favor de la moción de Vecinos por Candelaria, porque nuestra intención es la de no perjudicar a los trabajadores de Epelcan”.

-Suena raro, porque hasta aquí en todos los plenos los votos del grupo de gobierno han ido de la mano.
“Puede parecer eso, pero en el devenir de Epelcan nos dimos cuenta de que ha habido una encadenación de errores y estábamos dispuestos a votar a favor de la moción de Vecinos de Candelaria si esta no perjudicara a los trabajadores, pero todo estaba a expensas del informe del secretario, que a día de hoy no tenemos”.

-Ustedes han tenido que comerse un montón de sapos en este mandato con respecto al discurso que realizó Coalición Canaria hasta la firma de este pacto.
“Es lo normal cuando se firma un pacto entre dos partidos que han sido rivales. También hay que tener en cuenta que cuando se está en un pacto tienen que ceder los dos partidos y el PSOE, sin mayoría absoluta, ha tenido que hacerlo, como el expediente de la casa del anterior alcalde, que supongo que no les habrá sido fácil. Como hay un pacto, no todo lo que tú defiendes lo puedes conseguir, pero entre eso y no conseguir nada hay un trecho”.

-¿Cómo se sale del galimatías, social y políticamente hablando, de Bajo la Cuesta?
“Esperamos que antes de final de año los vecinos de las primeras viviendas, en el talud de Endesa puedan volver a sus casas, aunque para los vecinos del último tramo es un poco más complicado, porque siempre dependerá de Costas, que tiene la mayor parte del terreno. Otra cosa bien distinta es el futuro y el litigio que mantiene Costas con esas casas y el dominio público marítimo terrestre, donde podemos ayudar, pero no en todo lo que quisiéramos”.

-¿Es verdad que dijo usted que este expediente de Bajo la Cuesta lo hubiera llevado de otra manera?

“Yo no dije eso, es un error. Me preguntó un periodista qué habría hecho yo y le dije que hubiera reunido a los portavoces de cada partido político en el Ayuntamiento y al presidente de los vecinos, y con esa comisión iría de la mano a cada una de las administraciones competentes, aunque el final es el que es y es el que está siendo. Creo que aunque el final sea el mismo, de esa manera consensuada hubiera sido menos doloroso”.

-¿Barajan ustedes la idea de romper el pacto para que queden claras las diferencias entre socialistas y nacionalistas, eternos rivales en Candelaria, de cara a las elecciones de 2019?
“Históricamente, el PSOE y CC han sido rivales en los últimos 30 años, en los que siempre ha habido mayoría absoluta, y resulta complicado entender que pactemos. Pero aquí de lo que se trata es de darle estabilidad al municipio. Yo creo que CC y PSOE tienen que estar diferenciados desde el minuto cero, y lo que queremos es nuestro espacio en el Ayuntamiento. Hablan de que ha habido desconfianza o deslealtad, y miramos al municipio de al lado, Güímar, y en unos plenos se ha votado diferente y no ha pasado nada. Por votar diferente ciertas cosas no significa que seas desleal, desleal es votar diferente a lo que nuestro comité dice que votemos”.

-Pendientes de esa reunión del comité, ¿usted piensa que este pacto llegará hasta el final?
“A día se hoy resulta complicado saber qué puede pasar en el futuro. Yo solo quiero la estabilidad de Candelaria, pero, tal y como están las cosas, resulta complicado aventurarse e igual será necesario convocar la mesa del pacto para encontrar una solución”.

-¿Serán los presupuestos, que seguramente llegarán en mayo al Pleno, la definitiva prueba de fuego para el pacto?
“Cuando nos sentemos a debatir el presupuesto, ya le diré, pero todavía no se ha reunido el concejal de Hacienda con las áreas de Coalición Canaria, excepto en Policía, que ya se han hablado cosas, pero no se han rematado”.

-¿Y ha iniciado Coalición Canaria contactos con los tres grupos de la oposición para desbancar al PSOE del Gobierno municipal?
“Es verdad que los números dan para que se dé esa posibilidad, pero a día de hoy no se baraja esa opción. Que en el futuro se pueda dar si vamos a la oposición, ya será cuestión de hablar con el resto de partidos, pero hoy estamos en un pacto”.

-Por último, ¿cree Carlos Sabina que se ha distinguido la marca CC en el Gobierno municipal?
“No sé si se ha distinguido o no, pero en nuestras aéreas se ha hecho un buen trabajo, con nuevas plazas creadas por Recursos Humanos, trabajamos en el posible edificio de seguridad, se ha dado un impulso a las fiestas, hemos contribuido a la creación de la primera asociación de empresarios del municipio y en medio ambiente se están haciendo actividades. Todas esas cosas son nuevas, antes no existían y se están notando, al menos en la calle la gente así nos lo hace saber”.

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