Aprovechar el momento dulce y estable que atraviesa el club. Así definió Miguel Concepción, presidente del CD Tenerife, su apuesta por renovar tanto a Alfonso Serrano, director deportivo, por dos temporadas, como a José Luis Martí, su entrenador, un curso más. La clasificación para los play-offs ha resultado clave para anunciar un acuerdo que pasaba por ser un secreto a voces.
“Lograr el ascenso como jugador y como entrenador es un sueño, no podría pedirle más a la vida”, admitía un feliz Martí, quien reconocía su buena sintonía, en todo momento, con el club y con Alfonso Serrano, con el que seguirá compartiendo equipo de trabajo: “Siempre nos hemos dicho lo que pensábamos. Creo que esto es lo mejor para mí y para el club, porque aquí me siento como en casa”.
Cuestionado por la continuidad de Serrano, Martí dijo estar “tremendamente contento” de que permanezca en el club blanquiazul, porque el vallisoletano “nunca impone” su criterio a la hora de fichar: “Todo lo que he necesitado se me ha dado en cuanto a fichajes. Nunca impone sus ideas, sino que las expone, las argumenta y llegamos a un acuerdo; así es todo mucho más sencillo”.
Primera o Segunda
Lo que quedó muy claro en el acto celebrado ayer, en la sala de prensa del Rodríguez López, es que el actual proyecto no es flor de un día. Se logre o no el ascenso a Primera, el club atraviesa un momento “muy importante y lleno de estabilidad”, algo que se quiere aprovechar para dar el salto a la mejor liga del mundo.
“Es el momento adecuado para renovar a ambos, por su buena relación, que se trasmite al equipo y al club”, señalaba Miguel Concepción, que desveló que Alfonso Serrano dejó “la plantilla hecha” para conseguir el ascenso en el curso 2008/2009, algo que le da aún más crédito de cara al futuro.
La compenetración de entrenador y director deportivo también resultó clave para el presidente tinerfeñista: “Ambos han trabajado mucho y tienen buena química entre ellos. La armonía es total, el momento era el adecuado… Estamos agradecidos a Martí y a Alfonso Serrano, que es el que le ha dado los mimbres para hacer el equipo actual”.
Alfonso Serrano es la mejor prueba de las vueltas que puede dar un deporte tan caprichoso como el fútbol. Muy criticado desde su regreso a la Isla, el director deportivo dio con la tecla en forma de las contrataciones de Lozano, Amath o Aarón, con mucho grado de riesgo, pero que, finalmente, resultaron claves a la hora de entender la temporada de los tinerfeños.
El vallisoletano, que dijo sentirse “un chicharrero más”, desveló que el acuerdo para seguir en la Isla fue “muy rápido”. “Le expliqué mi proyecto al presidente y el acuerdo fue muy rápido. Tuve reuniones con otros equipos, pero desde el principio he demostrado mi cariño al Tenerife; estoy contento de seguir dos temporadas más aquí”.
El director deportivo reconoció que trabaja en la plantilla de la próxima temporada, sea en Primera o en Segunda, pero no quiso hablar de Juan Villar, recientemente contratado y que milita en el Real Valladolid, posible rival en los play-offs: “Tenemos un Plan A, en Primera, y un Plan B, en Segunda; en ambos querríamos mantener al mayor número de futbolistas”.
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