Si hacemos caso a la historia, el aficionado del CD Tenerife puede dormir tranquilo: el equipo de sus amores afronta su sexta promoción en su trayectoria en categoría nacional, con un balance de cuatro victorias (1972-1973, 1988-1989, 1989-1990 y 2012-2013) y una derrota (2011-2012).
La primera promoción que disputó el CD Tenerife desde su ingreso en el fútbol profesional fue de permanencia en Segunda División, en la temporada 1972-1973 ante el CD Ensidesa. El representativo dio buena cuenta del equipo asturiano en el Heliodoro Rodríguez López con un concluyente (6-2). En la vuelta, en Avilés, los blanquiazules cumplieron el expediente con un empate sin goles (0-0).
Jugadores, entre otros, como Del Castillo, Molina, Felipe, Lesmes, Esteban, Cabrera, Pepito, Medina, Jorge, Cantudo, Bergara, Domingo Rivero, José Juan, Lolo, Movilla, Mauro o Caamaño, todos ellos bajo las órdenes del charrúa Héctor Núñez, que había llegado a mitad de curso sustituyendo al vasco Ignacio Eizaguirre, fueron los artífices de dejar al CD Tenerife en Segunda División.
28 años después
Quién no recuerda la promoción con el Real Betis en la temporada 1988-1989, con dos partidos a cara de perro en el Heliodoro Rodríguez López y en el Benito Villamarín.
El CD Tenerife acaba tercero por detrás de Castellón y Rayo Vallecano, que logran el ascenso directo. El RCD Mallorca, cuarto, también disputó la Promoción de Ascenso. En el recinto capitalino con un lleno hasta la bandera, los blanquiazules golean a un alicaído Real Betis por 4-0, en el choque de ida de la Promoción. Los goles blanquiazules fueron anotados por el panameño Rommel Fernández (2), El Ghareff y Julio, defensor verdiblanco, en propia puerta. Unos días después el CD Tenerife de Benito Joanet, certificaba el ascenso por segunda vez tras 28 años fuera de la máxima categoría. Los blanquiazules cayeron por 1-0, con tanto del que posteriormente sería jugador tinerfeñista, Sebastián Cruzado, Chano.
En aquel partido, arbitrado de manera catastrófica para los intereses del CD Tenerife del mediático Joaquín Ramos Marcos, se dio la circunstancia de que pitó dos penas máximas, una para cada equipo: penalty a favor del CD Tenerife por derribo claro de Calleja a Perico Medina. El penalty lo lanzó el brasileño Guina al palo de la meta defendida por el argentino Neri Pumpido. En la recta final del choque, penalty en el área tinerfeña por derribo al chileno Pato Yáñez, que ejecuta Chano en gol. El árbitro ordena repetirlo por invasión de jugadores en el área, y Chano estrella el balón en la madera.
El gol de Eduardo
La temporada siguiente, 1989-1990, el CD Tenerife tiene que disputar la promoción de descenso ante el Deportivo de La Coruña. Empezó la Liga allá por el mes de septiembre un entrenador con mucho cartel, que fichó el presidente Javier Pérez para el banquillo tinerfeño, Vicente Miera. No le fueron bien las cosas al técnico asturiano, que fue destituido en enero de 1990 por los malos resultados. Llegó Xabier Azcargorta, sacó al equipo del descenso directo, pero no lo pudo salvar de la promoción.
El Tete no pasó del empate inicial, 0-0, ante el cuadro gallego y se lo jugó a todo o nada en el estadio de Riazor. Un gol del jugador tinerfeño Eduardo Ramos sirvió para ganar por 0-1 y el representativo seguir un curso más en la élite del fútbol español.
Una obligación
El CD Tenerife afrontó en la temporada 2012-2013 su último éxito en una fase de promoción. Los blanquiazules se proclamaron campeones de su grupo en Segunda División B y se clasificaron para disputar la eliminatoria de los Campeones. En suerte tocó el Hospitalet: 180 minutos que podían suponer el retorno del representativo a Segunda División, dos temporadas después de consumar su triste descenso a la categoría de bronce.
El CD Tenerife se impuso en el recinto de San Sebastián (3-1) con los goles de Luismi Loro, Raúl Llorente y Medina. En tierras catalanas, pese a perder (1-0), el CD Tenerife certificó su ascenso a Segunda División.
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