La Palma despide a Antonio Sosa, que falleció ayer a los 77 años de edad como consecuencia de una larga enfermedad, que combatió con la misma entereza y elegancia con la que luchó a lo largo de toda su vida en defensa de la importancia del turismo para la Isla, haciendo frente muchas veces a la crítica y la incomprensión de quienes no creían en el desarrollo de este sector.
Antonio Sosa fue un ferviente defensor del desarrollo turístico de La Palma, tanto desde las instituciones públicas como en los organismos privados. De hecho fue consejero de Turismo del Cabildo de La Palma en el primer Gobierno democrático, presidido por Gregorio Guadalupe.
También presidió el Centro de Iniciativas y Turismo, desde donde apostó por la promoción turística de La Palma y el desarrollo de infraestruras de ocio que sirvieran de reclamo para atraer visitantes. Así vivió luchas en primera persona, como cuando la Isla estuvo cerca de quedarse sin Parador Nacional o negociar la llegada del primer vuelo charter, en 1987, que no pudo aterrizar por la lluvia. Los turistas llegaron al día siguiente en barco.
Profesionalmente estuvo vinculado al transporte marítimo, como delegado de Trasmediterránea. Con su jubilación fue declarado delegado de honor de la naviera.
Hemeroteca
Publicidad
Esquelas