CC y PP mantienen contactos este fin de semana para tratar de limar las últimas diferencias con las miras puestas en cerrar en los primeros días de la semana entrante (lunes o martes) el acuerdo de gobierno. En este empeño se han implicado directamente los cabezas visibles de ambos partidos, Fernando Clavijo y Asier Antona, que no ha renunciado al plazo máximo dado por él para sellar el pacto -19 de julio-, más o menos cuando acaba el curso político y al borde de las vacaciones de verano en el Parlamento autonómico.
El PP pretende cuatro consejerías, aparte de la vicepresidencia del Gobierno. Y CC ha aceptado ceder Turismo y Obras Públicas y Transportes. El escollo está ahora en cuáles serán las otras dos, que saldrán de una terna: Economía (de la que CC no quiere desprenderse), Presidencia y Justicia, así como Agricultura, Ganadería y Pesca (el problema para Coalición es que su titular es de AHI, un partido que necesitan mimar porque incluso se llegó a replantear su proceso de integración en CC).
El desbloqueo en las negociaciones, que estuvieron paradas más de dos semanas, ha sido posible por la intervención de Clavijo y Antona, ya que en la fase de las comisiones negociadoras no hubo avances apreciables. Se reunieron el martes en el Parlamento canario, en un encuentro que habían anunciado los populares la víspera, y el viernes en la capital grancanaria, en secreto, como informó DIARIO DE AVISOS.
CC quiere que el pacto lo firme el propio Mariano Rajoy, como ya hiciera Pedro Sánchez con el roto acuerdo entre socialistas y nacionalistas. Y aunque el PP no está en contra de tal pretensión, lo cierto es que una fuente popular manifestó ayer al respecto: “Esto no es como lo de Pedro Sánchez, Mariano Rajoy ha dado plena autonomía a Asier Antona para los pactos” .
El viernes, Clavijo apeló a que impere el “sentido común” en las negociaciones que mantienen CC y PP, aunque se intentó desmarcar de este proceso ante los periodistas y dijo que era algo que llevaba la comisión negociadora entre ambas formaciones políticas. Pero su intervención para desentumecer las conversaciones e intentar avanzar hacia el cierre del acuerdo es un hecho. El presidente del Ejecutivo canario señaló que desde el pasado 23 de diciembre, cuando se quedó en minoría tras destituir a los consejeros socialistas y, por tanto, romper el pacto con el PSOE, ha estado a disposición de “hablar, negociar y trabajar de manera conjunta” con todos los grupos del Parlamento.
Sin embargo, fue el PP el que le ofreció, primero acuerdos parlamentarios, y luego su entrada en el Gobierno regional.
Durante varias semanas la posibilidad de que la negociación quedara definitivamente bloqueada estuvo en el aire, algo que ahora ya parece menos probable. Todo dependerá ya de que los últimos flecos queden resueltos en las próximas horas, más que días. El ultimátum de Antona sigue siendo válido.
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