El milagro Perdigón

Sin hacer mucho ruido y con escasos recursos, Jorge Perdigón ha obrado un nuevo milagro. El II Festival de Música de La Palma ha superado incluso el nivel alcanzado en la primera edición, que parecía difícil a priori. Por el escenario del Teatro Circo de Marte han desfilado personalidades de la música internacional como la pianista Maria João Pires, el violinista Pinchas Zukerman o la Diva del belcanto, Edita Gruberova. Además, la música clásica se ha colado en las aulas, en un plan formativo que ha llegado hasta un millar de estudiantes de La Palma, de la mano del educador musical y exdirector de Radio Clásica, Fernando Palacios.

Perdigón apostó hace más de una década por cubrir un hueco cultural que existía en La Palma y puso en marcha Ópera en el Convento. El tenor palmero atrajo a la Isla a primeras espadas de la escena mundial, gracias a las amistades que había forjado durante su época como cantante en Alemania y con el reclamo de La Palma, que estaba convencido de que seduciría a los artistas. Y así fue. Tanto que alguno de ellos se convirtió en un palmero de adopción, como Paolo Gavaneli. El placer de estar en la isla compensaba la imposibilidad de pagar determinados cachés. En medio llegó la creción de Acapo, la Asociación Palmera de Amigos de la Ópera.

Ópera en el Convento desapareció, pero cogió brío un nuevo proyecto cultural: el Ciclo de Música Jerónimo Saavedra Acevedo, dedicado a la figura del político canario, de raíces palmeras, y reconocido melómano. El año pasado, Jorge Perdigón dio un nuevo salto con la creación de La Palma Festival Internacional de Música. El éxito de su estreno y su proyección en el exterior, atrayendo público de distintas partes de Europa, ha consolidado este proyecto. Es extraño que el Festival de Música de Canarias no se haya fijado en el tenor palmero para desarrollar este proyecto, cuyo resultado este año ha sido muy cuestionado. Por puro egoísmo, celebro que sea así, porque el Festival palmero no dejará de crecer mientras esté en sus manos, que han fabricado un Ferrari con los recursos de un 600. No quiero ni imaginar la que podría liar si contara con el presupuesto del Festival de Canarias.