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“En España existe hoy el triple de los dentistas que son necesarios”

Francisco J. Perera Molinero
Francisco J. Perera Molinero
Francisco J. Perera Molinero, presidente del Colegio Oficial de Dentistas de Santa Cruz de Tenerife. / SERGIO MÉNDEZ

La lucha contra el intrusismo sigue siendo una de las grandes prioridades del Colegio Oficial de Dentistas de San Cruz de Tenerife, cuyo presidente, Francisco J. Perera, pone también de relieve, en esta entrevista con DIARIO DE AVISOS, que “la apertura descontrolada y autorizada por parte de nuestras autoridades educativas de facultades privadas de Odontología ha propiciado que en España exista hoy el triple de los dentistas que, según la Organización Mundial de la Salud, son necesarios”. Sin ir más lejos, en este momento existen alrededor de 650 dentistas colegiados en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, un número excesivo que empieza a provocar que haya profesionales en el paro.

-El Colegio Oficial de Dentistas realiza una continua programación de cursos de formación de su colectivo. ¿Cuáles son las líneas de trabajo en ese capítulo y qué proyectos puede anunciar de interés para los profesionales?

“El Colegio, a través de su Comisión Científica, elabora un intenso calendario de cursos (prácticamente uno por fin de semana), en el cual se tratan todos los temas de interés para los colegiados. Las preferencias en cuanto a los temas de estos cursos se extraen de una encuesta realizada entre todos los colegiados y así organizamos el programa tratando de contentar a todos. Lógicamente, hay algunos temas que tienen más aceptación que otros, pero, como le dije, tratamos de tocar todas las ramas de la especialidad y, de esta forma, conseguir que nuestros colegiados estén al día de los últimos avances en el campo de la odontología”.

-¿Cuáles son las principales novedades del sector en materia normativa? ¿Qué nuevas medidas son de interés para los profesionales y usuarios?

“En materia normativa, realmente, no existen novedades. Los profesionales deben estar colegiados en el Colegio profesional donde ejerzan su actividad y las clínicas deben estar acreditadas, en nuestro caso, por el Servicio Canario de la Salud. Los pacientes deben saber que están en su derecho de exigir a quien los atiende que les muestre su título para demostrar que está debidamente autorizado para la práctica de la profesión. De esta forma nos beneficiamos todos y desenmascaramos a posibles intrusos que ejercen la profesión con el consiguiente riesgo para la salud del paciente”.

-¿Existen casos de intrusismo profesional de importancia a estas alturas? ¿Profesionales sin titulación que ejercen, especialistas sin la cualificación acreditada, etcétera?

“El intrusismo es un problema contra el que la profesión lleva luchando desde hace muchísimos años y, aún hoy, es una de las principales preocupaciones de los que batallamos porque esta profesión adquiera prestigio y sea respetada por la población. Los intrusos no solo pueden provocar daños en aquellos pacientes que por desconocimiento acudan a ellos para ser tratados, sino que también originan un desprestigio que salpica a todos los que, cumpliendo con la ley , trabajamos en el marco de las normas establecidas y con nuestra titulación en regla. Cuando un paciente se pone en manos de uno de estos personajes, pone en grave riesgo la salud de su boca, cuando no la salud de todo su organismo. Es por ello que el Colegio y la Junta que en estos momentos presido harán todo lo que esté en su mano para luchar contra esta lacra que nos afecta a todos los profesionales de la salud oral”.

-Es evidente que existe una desinformación general sobre la importancia de la salud dental. En ocasiones, se citan los casos de deportistas expuestos a lesiones por esa causa y es notorio que el ciudadano medio relativiza la salud de su boca. ¿Cómo combatir esta tendencia?

“Lógicamente, la fórmula es proporcionar información a los pacientes a través de todos los medios posibles, es decir, a través de los consejos que cada uno de nosotros damos a nuestros pacientes en el día a día de las consultas, a través de las diferentes campañas informativas que el Colegio organiza a lo largo del año y en las que tratamos de concienciar a toda la población, poniendo especial énfasis en los más pequeños y en la prevención de la patología oral, a través de los medios de comunicación con entrevistas como esta o intervenciones en programas televisivos y, en definitiva, a través de cualquier fórmula que nos permita transmitir la importancia que tiene para la salud general de una persona el mantenimiento de una correcta salud oral. Cuando la población reconozca que la prevención es sencilla y barata, habremos dado un paso importante para la mejora de la salud oral de la población de España”.

-¿Las cadenas de franquicias de clínicas nacionales que han proliferado en los últimos años son un hándicap para la calidad del servicio o no, teniendo en cuenta que sus profesionales están también bajo el amparo de su Colegio?

“La razón de la proliferación de este tipo de establecimientos en los últimos años es la plétora de profesionales que existe hoy en nuestro país. La apertura descontrolada y autorizada por parte de nuestras autoridades educativas de facultades privadas de Odontología ha propiciado que en España existan hoy el triple de los dentistas que, según la Organización Mundial de la Salud, son necesarios. Sin ir más lejos, en este momento tenemos alrededor de 650 dentistas colegiados en la provincia de Santa Cruz de Tenerife. Este número excesivo de profesionales, que ya empieza a engrosar en algunas provincias las listas de desempleo, favorece la aparición de negocios que, en su mayoría, no son propiedad de profesionales de la salud, sino de empresarios más preocupados por los resultados económicos que por proporcionar a sus pacientes los mejores tratamientos. No podemos ni debemos juzgar a todos estos establecimientos con el mismo rasero, pero el hecho de que la inmensa mayoría de las reclamaciones por mala praxis presentadas por los pacientes en los diferentes Colegios de España provengan de ellos, debe hacernos reflexionar sobre si es este el modelo sanitario más adecuado para tratar a la población. Por supuesto que los profesionales que trabajan en este tipo de centros están bajo el amparo del Colegio, pero también hemos de decir que, en muchos casos, la libertad que estos profesionales tienen en su práctica está limitada por las condiciones impuestas por los empresarios propietarios de estos negocios”.

-Hablemos de algunas novedades que se incorporan a la oferta de servicios. ¿Qué alternativas surgen a los brackets, implantes…?

“La ciencia médica está en constante evolución y la Odontología no es una excepción. Los avances en los últimos años han sido espectaculares. La aparición de los implantes dentales ha hecho desaparecer casi a las prótesis completas tal y como las conocíamos 30 años atrás. La utilización de la microscopía en algunos tratamientos ha hecho mejorar los resultados de estos. La aparición de la radiología en tres dimensiones ha revolucionado el diagnóstico y el tratamiento de muchas patologías orales. Esta tecnología en 3D también se aplica más recientemente a la prótesis y la ortodoncia. Y en este sentido tenemos la impresión de que estamos solo a las puertas de lo que serán avances muy prometedores. El mundo de la ortodoncia, desde hace años, también ha evolucionado con la aparición de la ortodoncia invisible o la ortodoncia lingual. Como le decía, estamos en continua evolución y los profesionales han de mantenerse constantemente atentos a estos cambios para no quedarse atrás y poder ofrecer a sus pacientes la mejor atención posible”.

-¿Hacia dónde va el futuro de la salud dental?

“El futuro será bueno en la medida en que la población aprenda que el mejor tratamiento es el que no se hace, es decir, que la prevención de la patología es la mejor inversión que podemos hacer. Si hacemos prevención manteniendo una buena higiene oral y visitamos al dentista dos veces al año, podremos evitar la mayoría de las patologías que atendemos a diario los dentistas en nuestras consultas”.

-¿Existe alguna estrategia para vencer el miedo atávico al dentista?

“El miedo al dentista es algo que en la odontología que se practica hoy en día no tiene mucho sentido. Las técnicas de anestesia que aplican los profesionales, la calidad de los anestésicos, las agujas que utilizamos, que son muy finas y que no se sienten al penetrar, por no hablar de la sedación consciente, que ya se puede encontrar en algunas clínicas, hacen que las visitas al dentista hayan cambiado mucho en las últimas décadas. Esa imagen del dentista que provoca dolor está superada y el paciente que acude con regularidad a su dentista de confianza sabe que los tratamientos que le van a aplicar no tienen por qué ser dolorosos en absoluto. La paciencia del profesional junto con la confianza que da el trato frecuente del paciente con su dentista de cabecera hacen que poco a poco vayamos dejando atrás la figura del dentista que causa dolor”.

-Antiguamente existían los cirujanos-barberos que, además de cortar la barba y el cabello, practicaban sangrías, extracciones de muelas y blanqueaban dientes. Hoy es una titulación universitaria. ¿De sus orígenes qué cabe destacar como herencia positiva, y del futuro qué cabe aguardar en esta actividad?

“Es cierto que los precursores de los dentistas actuales fueron los barberos sacamuelas y también es cierto que esta profesión se reguló en España más tarde que en otros países de Europa o América, pero en nuestros días poco o nada tenemos que ver con aquellos personajes que, como habilidad casi única, tenían la destreza de extraer aquellas piezas que estuvieran causando dolor al paisano de turno. Nuestros dentistas reciben una formación universitaria de cinco años de duración y salen preparados para atender a los pacientes. Además, se mantienen en constante formación por medio de cursos, másteres, conferencias, etcétera.”.

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