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Poyatos defiende que el Love Festival redunda en una sociedad igualitaria

La magsitrada del TSJC participará en la II Convención Político y Social de Canarias en favor de la Igualdad
Gloria Poyatos, con Anselmo Pestana y Jordi Pérez. | DA

El Love Festival contará en esta edición con un icono dentro de la judicatura española en materia de género, la magistrada del Tribunal Superior de Justicia de Canarias y presidenta de la Asociación de Mujeres Juezas, Gloria Poyatos, que mostró su respaldo a esta iniciativa del Cabildo y definió como una propuesta “muy vanguardista, rompedora y que estoy convencida de que es el camino para avanzar hacia una sociedad igualitaria”.

Porque, como recalcó la jueza, cuyo nombre cobró eco internacional cuando decidió darse de alta como prostituta en Hacienda y la Seguridad Social para demostrar que se podía legalizar esta actividad, en el siglo XX solo se ha conquistado la igualdad formal, pero no la real. Y son proyectos como el Love Festival los que “ayudan a hacer este camino”.

El consejero de Desarrollo Económico y promotor de esta iniciativa, Jordi Pérez Camacho, concretó que Gloria Poyatos intervendrá tanto en la segunda edición de la Convención Político y Social de Canarias en favor de la Igualdad del Love Festival, donde presentará el proyecto pedagógico Educando en justicia igualitaria, que coordina en Lanzarote, y en las jornadas que abordará el reto de la Justicia en materia de igualdad, donde participará además el presidente de la Audiencia Nacional, José Ramón Navarro Miranda.

La jueza destacó que el Love Festival se asemeja al proyecto que desarrolla en la isla conejera, que ha sido una incitativa “pionera en el mundo” y que persigue el “acercamiento de los jóvenes a la justicia desde una perspectiva de género. En su desarrollo están implicados más de 40 operadores de todos los ámbitos de la justicia y participan más de mil jóvenes. “Nos trasladamos a los centros de enseñanza y educamos en los valores de igualdad, respeto y tolerancia, porque nuestros jóvenes no son los adultos del mañana, son seres del presente que ya pueden mejorar la sociedad”, explicó Poyatos.

En la segunda parte del programa, llevan a los alumnos al Palacio de Justicia y asisten a juicios con perspectiva de género. Concluyendo con la preparación de un juicio por parte de los jóvenes, que celebran en una sala de real. “Un evento que es único para ellos y les genera un recuerdo permanente en sus vidas”. “Es lo que se llama educación transformativa, que es la que trabaja también el Isla Bonita, por lo que no puedo ser más que una seguidora de proyectos como el Love Festival, que van a cambiar el mundo”.

La magistrada se mostró muy crítica con la ausencia de mujeres en “la cúpula de todos los poderes económicos donde se toman las decisiones que mueven el mundo”, siendo la justicia “el paradigma del techo de cristal”. De modo gráfico, señaló que “cada año, en la foto oficial de la justicia, solo habitan hombres, cuando las juezas somos ya el 60% de la carrera por debajo de la franja de edad de 50 años y el 52% sin franja de edad”. “Esa foto niega las capacidades de las juezas en este país, la aportación que hacemos a la Justicia española, teniendo en cuenta que rubricamos más de la mitad de las sentencias que se dictan, y exhibe sin rubor el techo de cristal que existe en la Justica”.

Como ejemplo señaló el caso del Tribunal Constitucional, que desde su constitución en 1980, de los 64 integrantes que ha tenido solo seis han sido mujeres. “Ese Tribunal Constitucional no representa a una sociedad que se compone de hombres y mujeres, y le falta legitimidad democrática, desde mi punto de vista, porque en la representación de la diversidad social está la democracia”. “Es un verdadero insulto a la inteligencia que un Tribunal Constitucional, que debe ser un guardián de la igualad, en su propio seno carezca de ese equilibrio”.

Otro “insulto a la inteligencia” aseguró que se verá próximamente cuando se produzca el debate  sobre el recurso de anticonstitucionalidad de la Ley del Aborto. “Diez hombre y dos mujeres, es decir, una aplastante mayoría masculina, van a debatir y discutir de forma ajena y abstracta sobre algo tan femenino como el proceso biológico del embarazo”.

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