La segunda edición del Love Festival entró en la recta final con toda la intensidad que solo la música sabe imprimir. Sobre el macroescenario creado en el Puerto de Tazacorte desfilaron bandas como Amaral, La Oreja de Van Gogh, Morat, Sweet California, el cantante Miguel Bosé y los músicos Carlos Jean y Brian Cross.
Miles de personas se concentraron en el Puerto bagañete para disfrutar de este concierto, que encerraba también el mensaje que constituye el núcleo del Love Festival: la promoción de una cultura del respeto ante las distintas formas de vivir la sexualidad.
Un puerto que ha sido todo un símbolo como espacio público de la defensa en favor de los derechos del colectivo LGTBI, al iluminar su dique con los colores de la bandera del arcoíris.
Las estrellas de la música que participaron en el concierto bajaron a la tierra a su llegada a La Palma y así Amaral conoció de primera mano la tarea que se desarrolla en una plantación de plátanos, cultivo esencial en el paisaje y la cultura de la Isla. Mientra que los componentes de la Oreja de Van Gogh se sumergieron en otro símbolo de La Palma: el Observatorio del Roque de los Muchachos, donde conocieron el corazón del Gran Telescopio Canaria.
Pero ayer no solo fue protagonista la música, también la gastronomía tuvo un lugar destacado dentro de la agenda del Love Festival. Durante la mañana, Los Llanos de Aridane ofreció una buena muestra de los mejores sabores que ofrece la isla de La Palma, a cargo de destacados cocineros. Mientras tanto, la moda también continuó teniendo presencia en la pasarela del Love Festival, con el desfile de ropa y complementos infantiles.
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