El Ministerio Fiscal solicita cinco años de cárcel para un policía local de Las Palmas de Gran Canaria al que acusa de haber exigido sobornos de 40 a 100 euros a cuatro ciudadanos a cambio de retirarles las multas de tráfico que acababa de imponerles por distintas infracciones.
El caso de este agente, J.M.C.L., se verá a partir del lunes en la sección segunda de la Audiencia de Las Palmas ante un Jurado, ya que el cohecho es uno de los delitos cuyo enjuiciamiento se asigna en la legislación española a los tribunales populares.
Los cargos que se achacan a este policía local se corresponden con cuatro sanciones de tráfico que impuso entre octubre de 2014 y febrero de 2015 a otros tantos conductores.
Los cuatro afectados se avinieron a pagar al agente las mordidas que este presuntamente exigía para romper los boletines de denuncia o para no llegar a tramitarlos, de 40 a 100 euros, pero después denunciaron lo ocurrido ante los mandos de la propia Policía Local de la capital grancanaria o ante el Cuerpo Nacional de Policía.
La Fiscalía asegura que cuando los conductores se dirigían al agente para pedirle explicaciones por el motivo que le había llevado a denunciarles, este respondía con frases como “todo es negociable”, o “yo cierro los ojos, pero hay que buscar una solución”, o directamente solicitándoles el pago de una cantidad concreta.
El Ministerio Público propone que, además de la pena de prisión, se imponga al acusado una multa de 5.400 euros y que se le prohíba trabajar en cualquier cuerpo policial o entidad relacionada con la seguridad vial durante un período de diez años.
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