El corto plazo para solicitar las ayudas al alquiler de viviendas, que acaba esta semana y con solo 10 días, ha provocado largas colas en las sedes del Instituto Canario de la Vivienda, tanto en Tenerife como en Gran Canaria. Se trata de las subvenciones convocadas por el Gobierno de Canarias a las que pueden acogerse las familias con menos recursos, y forman parte del recién prorrogado plan estatal en esta materia.
Con el calendario en la mano, los 10 días hábiles acaban el miércoles, pues el plazo empezó a contar el 2 de agosto -un día después de la publicación en el Boletín Oficial de Canarias de la resolución con la convocatoria y las bases por las que se rige y, descontando fines de semana y hoy, que es festivo, mañana se cumple el periodo establecido. Como informó DIARIO DE AVISOS el pasado día 3, la convocatoria carece del margen suficiente para una demanda potencial de más de 10.000 personas.
Algunos solicitantes se han quejado de estas premuras. Nada más conocerse la convocatoria, el grupo de Podemos en el Parlamento de Canarias reclamó públicamente la ampliación del plazo, porque auguraba que “muchas personas ni siquiera llegarán a recibir la información y el asesoramiento para tramitarlas, pues muchas veces se hace a través de los servicios sociales municipales, que ahora están bajo mínimos por el periodo estival”. Una queja que también ha expresado la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) de Santa Cruz de Tenerife. Pero la directora del Instituto Canario de la Vivienda, Pino de León, ha declinado ampliar el periodo de solicitud, pues argumenta que en otras comunidades autónomas también se dan 10 días hábiles. En todo caso, se mostró “consciente” de que en agosto puede ser “complicado” para algunos interesados, y por ello se les “facilita considerablemente” el trámite, pues, en esta primera fase, tienen que presentar solo el contrato de arrendamiento, el formulario de solicitud y el certificado de empadronamiento. Asimismo, Vivienda ha abierto diversos canales para presentar la documentación por Internet, algo que se puede hacer “desde cualquier punto del planeta”, según subrayó la Consejería días pasados.
Las ayudas -cuyo presupuesto total asciende a 1.276.000 euros- cubrirán el 40% de la renta anual de la vivienda alquilada, con un límite máximo de 2.160 euros, que se abonarán en un pago único, una vez que acrediten que han satisfecho esas cantidades al arrendatario. El importe mensual del contrato de alquiler no podrá superar los 450 euros, sin incluir gastos de comunidad o suministros, tasas o impuestos. La consejera regional de Vivienda, Cristina Valido, ha anunciado que el Gobierno canario tiene intención de aumentar la partida de ayudas al alquiler hasta los 5 millones de euros.
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