Las calas / inspecciones con las que se va a determinar la posible existencia de cámaras sanitarias en 156 bloques de la urbanización El Cardonal, tras desalojar dos viviendas el pasado mayo al encontrarse defectos bajo la estructura de estos dos pisos, comenzarán el próximo 4 de septiembre.
Desde el Ayuntamiento de La Laguna informaron que se encomendó a Muvisa la gestión de los trabajos necesarios para la realización de estas inspecciones y que, desde el anuncio de esta acción el pasado mayo, los trabajadores sociales de Muvisa han realizado visitas a todos los bloques para recabar las preceptivas autorizaciones por escrito de los presidentes de cada uno de los bloques, explicar lo que se va a hacer y resolver dudas. Un proceso que desde el Consistorio calificaron de “complejo” porque en varios bloques no había constituida ninguna comunidad de vecinos, por lo que los trabajadores sociales han hecho un trabajo de apoyo técnico, asesoramiento y colaboración para la realización de los trámites necesarios para constituir las comunidades.
De momento ya se ha elaborado un estudio de la proyección de las calas a realizar, que estarán en torno a las 575 en los 156 bloques. Desde Muvisa se contactó con siete empresas especializadas para solicitar presupuesto y se escogió a las dos que pueden hacerlo en menor plazo y que ofrecen un mejor precio.
TRES MESES
En concreto, se estima que los trabajos tendrán una duración de tres meses. Primero se realizarán las calas y en aquellos bloques en los que se descubra que hay forjados sanitarios se abrirán huecos más grandes para ventilar y que se pueda realizar una inspección más exhaustiva. Además, si se detecta cualquier anomalía que se considere urgente se actuará sobre la marcha. Donde no exista forjado sanitario se procederá al cierre de la cala.
Durante las inspecciones del pasado mayo se encontró que cuando se ejecutó el bloque 71, a consecuencia de los desniveles del terreno se realizó un forjado sanitario, es decir, una cámara que se construye para aislar el edificio del suelo aportándole así salubridad. Sin embargo, los técnicos hallaron que esta zona, que debe estar bien ventilada, estaba totalmente cerrada, lo que había provocado que se fuera acumulando condensación por la humedad, deteriorando las viguetas entre las bovedillas.
Uno de los propietario que se desalojó sigue realojado en un piso de alquiler pagado por el Ayuntamiento y en su bloque, el 71, se está haciendo ya el proyecto para el refuerzo, que se iniciará en octubre.
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