Álvaro Rodríguez López

Juan Evangelista Rodríguez (1862-1943), natural de Santa Cruz y de ascendencia gallega, casó con 16 años con Rosalía López (1861-1943) de 17. Tuvieron a lo largo de 22 años, 11 hijos de los que sobrevivieron 10, supervivencia desconocida en el Tenerife de la época. El progenitor de la saga Rodríguez López, desarrolló en el puerto trasatlántico de Santa Cruz lo que hoy llamaríamos una empresa de servicios para transportes y abastecimientos. Su descendencia, luego de 150 años, comprende seis generaciones. En el siglo XIX, esta era considerada el primer capital de las familias.
Juan Evangelista Rodríguez, tuvo 10 hijos 7 varones y 3 mujeres. Juan (1879-1960) militar y médico, casado con Ana Maffiote. Manuela (1882-1981) casada con Francisco Garavito. Álvaro (1885-1958), murió soltero. Julia (1887-1976), casada con Juan de los Ríos. Heliodoro (1889-1950), empresario, casado con Amparo González. Imeldo (1891-1962), marino, casado con María Cabrera. Conrado (1894-1976), empresario, casado con Ana Braun. Adalberto (1896-1946), médico, casado con Carlota González. Eulalia (1899-1994) casada con el médico Ángel Capote y el décimo Corviniano (1901-1982), oculista, casado con Matilde Galván.

Juan Evangelista Rodríguez, empresario de éxito, es padre de Álvaro, cuya figura recoge el libro de Juan Carlos Díaz Lorenzo, Álvaro Rodríguez López 1885 – 1958. Simbiosis entre la Gomera y Fred Olsen. Álvaro con 15 años fue enviado a Burdeos a estudiar contabilidad y francés. En 1902 a Londres y en 1906 a Nueva York. Algo propio en las familias burguesas de la época. Con 23 años, en 1908, Álvaro ingresa en la naviera noruega Thorensen, donde con 30 años en 1915, llega a jefe de la casa en Canarias. Desde 1906 había visitado La Gomera con Thomas Olsen, pariente de Otto Thorensen, con quien en 1909 fundó la originaria Sociedad Lomada de Tecina.

Álvaro Rodríguez López, desarrolla entre 1910 y 1936 una de las más exitosas carreras empresariales de Canarias, gracias a su alianza con los Olsen-Thorensen. Dos elementos de éxito, mantener el 50% de las acciones en las empresas comunes y llevar la gestión local. En paralelo desarrolla sus empresas, de cabotaje entre islas, Tenerife, Gran Canaria, La Gomera, La Palma. Delegado de Fred Olsen y consignatario de cuatro navieras más, tres noruegas y una danesa, con empresas de servicios y suministros al puerto, flota pesquera y conservera en Playa Santiago. En la Naviera con Fred Olsen y la suya propia viaja a Noruega, Inglaterra, Francia, España, Italia y Dinamarca. En La Gomera con los Olsen desarrolló una empresa agrícola exportadora, con tomates y plátanos, a su vez en Tenerife, Adeje, Guía, Santa Cruz y el norte, y cuyos servicios, suministros, transportes y comercialización, ofrecía en toda la cadena hasta entrega en puerto de destino.

Álvaro Rodríguez López en 1929 es el primer operador en el puerto de Santa Cruz y de Canarias. Desde el año 31 relacionado con el Partido Republicano Tinerfeño, escisión del Partido de Lerroux, presidente de Gobierno en el Bienio Negro. Desde el 23 de julio del 32, hasta el 14 de febrero de 1936, se publicó el diario Hoy, del cual era el primer financiador. Lo editaba Editorial Tenerife SA, cuyo presidente, Maximino Acea, fue presidente del Cabildo entre el 31 y el 36. Hoy fue el vehículo de expresión de la sociedad portuaria. Su primer número prologado por Niceto Alcalá Zamora, presidente de la República y el último de 14 de febrero del 36, coincidiendo con la primera vuelta de las elecciones nacionales, donde ganó el Frente Popular, prólogo de la guerra. Es de leyenda el pacto de Álvaro, cuando van a ajusticiar a su primo hermano, el diputado radical Rubén Marichal López, donde compra su vida al Ejército con las fincas de Hoya Fría. No da este artículo para desarrollar la amplísima labor social, asistencial y benefactora de Álvaro y su familia, en Tenerife y la Gomera.