La Policía ha trasladado a Cataluña el conocido como camión antidisturbiaspara la disolución de turbas y manifestaciones el próximo 1-O: día de referéndum (o no). Fue adquirido a finales de 2013 y costó casi 500.000 euros. Contiene dos depósitos: uno de 7.000 litros para el agua y otro de 60 para el colorante, informa El Español.
Se trata del único vehículo policial con capacidad para derramar líquido a presión. El tinte tiene como objetivo marcar a aquellos que lideren las protestas descontroladas.
Nunca ha sido utilizado y según explican fuentes policiales a El Español, se encargará de proteger los edificios de titularidad estatal.
Su llegada a Cataluña se enmarca en una “decisión técnica” y no se contempla su utilización. Hasta ahora, nunca ha disparado. Su aparición ha sido siempre preventiva.