“La alarma se ha producido al ocultarse información a los ayuntamientos y la ciudadanía”

La presidenta del grupo parlamentario Socialista, Patricia Hernández, manifestó ayer que la alarma en torno a la proliferación masiva de microalgas en las costas canarias “la ha producido el propio Gobierno de Canarias al hurtar y ocultar información de forma deliberada a los ayuntamientos y ciudadanía durante todo este tiempo”.

En la comisión parlamentaria donde compareció el Ejecutivo a iniciativa de la oposición -excepto ASG-, Hernández recordó que las primeras apariciones de microalgas se dieron en torno al 20 de junio, tras lo que se cerraron playas como las de Candelaria, Granadilla de Abona y, tres días después, La Restinga. Como consecuencia de ello, añadió, “los ayuntamientos tomaron muestras pero no recibieron las primeras instrucciones de la Consejería de Sanidad hasta el 25 de julio”. ¿Por qué transcurre un mes entero desde que aparecen las microalgas hasta que los ayuntamientos de Tenerife reciben las primeras indicaciones?, inquirió. “¿Por qué vuelve a pasar otro mes, ya con las manchas en las costas de Gran Canaria, y no es hasta el 28 de agosto cuando se envían las instrucciones a los ayuntamientos?” “¿Por qué no informaron del certificado que pedía prohibir el baño”. Desde su punto de vista, “la falta de información ha hecho que proliferen los bulos, tanto como su rotundidad en ciertas informaciones sobre la nula relación de las cianobacterias con los vertidos sin disponer de un estudio”.
También la portavoz en Sostenibilidad, Nayra Alemán, denunció la falta de información: “Hoy no estaríamos aquí si Clavijo hubiese transmitido un mensaje de tranquilidad”.

Noemí Santana: “Se ha mentido a la sociedad y se ha improvisado”

“Ustedes son un claro ejemplo del avestruz: esconder la cabeza hasta que el problema pase”. La líder y portavoz de Podemos, Noemí Santana, profirió que “se ha mentido deliberadamente a la sociedad, se ha ocultado información, y el propio presidente ha mandado callar la contestación ciudadana”. En su opinión, Greenpeace se ha quedado corta al nombrar a Clavijo como uno de los “villanos del clima”.