Habrá que esperar hasta el último momento, cuando sea oficial, pero, a pesar de todo lo hablado durante el verano, Nano está muy cerca de ser jugador del Levante de cara a la próxima temporada. El CD Tenerife se mostró dispuesto a igualar la oferta de cesión que le pudiera llegar al delantero, disponiendo para ello de más de 500.000 euros, cantidad que iban a poner sobre la mesa, pero fuentes cercanas a la entidad valenciana desvelaron ayer que el atacante había dado el sí a los granotas para jugar en Primera División.
Con los vaivenes que ha tenido el caso hasta última hora, o hasta que el Levante lo anuncie, sería una temeridad afirmar con rotundidad que el jugador no acabará en la Isla y el mejor ejemplo fue lo vivido a lo largo de la jornada de ayer.
Medios nacionales dieron por hecha la salida de Nano rumbo a casa. En Eibar lo comenzaban a ver como una realidad y en el Tenerife estaban convencidos de que tendrían opciones de contar con el jugador hasta última hora del cierre de mercado. Sabiendo que contaba con una opción preferencial a la hora de recibir al jugador a préstamo, Alfonso Serrano había continuado firme en su idea, lo mismo que José Luis Martí, algo que ha quedado patente de manera pública después de las manifestaciones de ambos cada vez que se les ha presentado la oportunidad, pese a los fichajes realizados y al buen inicio de campaña del equipo.
Todo cambió cuando aparecieron los valencianos. El Levante quiere contar con Nano y sus representantes trasladaron al Eibar que querían aceptar dicha posibilidad, pese a que, en principio, es un rival directo en la lucha por la permanencia. El club armero había mantenido contactos ayer con el Tenerife, que vio como entraba en escena un invitado inesperado después de que el Real Oviedo, a donde no había querido ir el atacante a pesar de estar dispuesto a presentar una suculenta oferta, también quisiera hacerse con sus servicios para reforzar su plantel.
Más allá de los fichajes de Longo o Malbasic, sumados a Villar y Casadesús, algo que había generado cierta sensación en la afición blanquiazul de que Nano no era ya tan fundamental en el proyecto de esta temporada, desde el club -Serrano y Martí-, se tenía un compromiso claro adquirido con el jugador, no queriendo dejarlo solo justo en el momento más importante, el que podría traerlo de regreso a la Isla, y de ahí que pidieran un esfuerzo a la entidad, que esta aceptó, para pagar la ficha del tinerfeño, algo más de 300.000 euros, además de una cantidad para el club vasco.
Hasta las 23.00 horas de hoy, que se cierra para el Tenerife el mercado de fichajes, todo puede parecer, pero desde el club no son optimistas respecto a Nano.
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