Andrea Abreu apura las últimas líneas de su trabajo de fin de grado. En unos días acabará el camino que emprendió hace unos años en la Facultad de Ciencias Políticas, Sociales y de la Comunicación de la Universidad de La Laguna, donde se convierte en periodista. La carrera es solo un reflejo de su verdadera pasión: la lectura. “Comencé a escribir como prolongación de todo lo que leo”, apunta en una entrevista esta poetisa y escritora novel, que se estrena en el mundo editorial con el poemario Mujer sin párpados, un trabajo que versa sobre el paso del tiempo, el cambio que se produce entre la adolescencia y la adultez, compuesto por 21 poemas que narran su experiencia vital. “Todas las composiciones tienen en común el desarraigo a “la tierra”, esto es, al padre y a la madre y la tristeza que produce darse cuenta de que la vida no es color de rosa”, agrega.
El poemario, que se puede conseguir a través de Internet y en la Librería de Mujeres de Santa Cruz de Tenerife, ha sido editado por Versátiles, una empresa andaluza dirigida por Ángel Garrido, el primero en apostar por el talento de la joven tinerfeña que antes autoeditó el fanzine Primavera que sangra. Asimismo, algunos de sus poemas han sido publicados en revistas digitales y en una antología de nuevas voces canarias de la revista La Galla Ciencia.
Mujer sin párpados comenzó a gestarse cuando Abreu tenía tan solo 19 años, inspirada por los poemas de la argentina Alejandra Pizarnik. Un trabajo que mantuvo constante hasta cumplir los 21, cuando comenzó su lucha para pasar del manuscrito al libro. “Envié mis poemas a varias editoriales y fue Versátiles Editorial la primera en interesarse por ellos”, relata.
El libro se presentó por primera vez en la Librería de Mujeres a finales de julio, y el próximo jueves, día 7, volverá a presentarse, esta vez en la Escuela Canaria de Creación Literaria, dirigida por Antonia Molinero, a las 20.00 horas. Andrea Abreu comienza ahora a hacerse un hueco en el mundo de la literatura canaria, posicionándose entre una de las voces más prometedoras de su generación. PlayGround, por ejemplo, la nombra entre las 25 poetas menores de 25 años más destacadas del territorio nacional. Y eso que su carrera apenas empieza.
Una carrera que ahora pretende dirigir hacia la redacción periodística. Su trabajo de fin de grado versa sobre las crónicas de Leila Guerriero, su fuente de inspiración. “Guerriero dice que la realidad es tan compleja, que no hace falta inventarse nada”, comparte con el DIARIO. Y precisamente, contar su realidad es uno de sus principales objetivos siempre.
Aunque su camino la lleva ahora a Madrid para seguir su formación en periodismo, no deja de escribir poesía, y ya prepara una segunda publicación.
Cuando escribir se convierte en otra manera de bailar
Andrea Abreu baila desde los tres años. Esa afición suya no la abandona, menos ahora, que dedica su tiempo y esfuerzo a las letras. Considera que “escribir es otra forma de bailar”. Siempre supo que podría combinar sus dos pasiones: la literatura y la danza, aunque ha tenido que abandonar su sueño de bailarina. Por ahora…
Doodkist – Por Andrea Abreu
no temo
en el fondo
el lugar
adonde
irán
a parar
mis huesos
me asusta
más saber
qué
harán
con toda
esta
imaginación
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