icod de los vinos

Apoyo unánime del Senado para declarar al Drago Patrimonio Mundial

El PP presenta la propuesta en el centenario de la proclamación del árbol milenario de Icod de los Vinos como monumento de interés nacional; de lograr la candidatura sería la primera especie vegetal en la lista de la Unesco
Miles de personas se acercan cada año a Icod de los Vinos a visitar el drago milenario. Fran Pallero
Miles de personas se acercan cada año a Icod de los Vinos a visitar el drago milenario. Fran Pallero
Miles de personas se acercan cada año a Icod de los Vinos a visitar el drago milenario. Fran Pallero

El 23 de febrero se cumplieron cien años desde que en 1917 el drago milenario, situado en el municipio de Icod de los Vinos, fuera declarado como monumento natural de interés nacional. Una fecha que pasó prácticamente desapercibida por el entonces grupo de gobierno de Coalición Canaria (CC) y también por el resto de instituciones pese a que el imponente árbol y el parque que lo rodea son uno de los símbolos más emblemáticos y visitados de Tenerife.

El Drago milenario de Icod de los Vinos | Sergio Méndez
El Drago milenario de Icod de los Vinos | Sergio Méndez

Este supuesto olvido no se condice con el interés y el trabajo mostrado años anteriores. En 2002 el Ayuntamiento norteño inició un expediente para solicitar a la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) la declaración de patrimonio de la humanidad a favor del singular ejemplar, que quedó paralizado dos años después al no haber remitido al Gobierno regional la memoria documentada y justificada que acreditara las circunstancias que concurren en el drago para ser distinguido como tal.

El proyecto se retomó en el año 2011 gracias a una propuesta vecinal liderada por el icodense Álvaro Fajardo y avalada por el Comité Técnico del Parque del Drago. Pero fue en abril de este año cuando la senadora del Partido Popular (PP) y concejal del grupo de gobierno, Isabel García, presentó una propuesta en la Cámara Alta para avanzar en la resolución de la solicitud ante la Unesco y defender la candidatura del árbol como patrimonio mundial.

La intervención de la senadora tuvo lugar el 25 de septiembre y consiguió el apoyo unánime de la Comisión de Cultura del Senado. No obstante, ello requerirá el visto bueno del Gobierno central, previo acuerdo del Consejo de Patrimonio Histórico y su grupo de trabajo de Patrimonio Mundial, y de ser incluida en la lista, la defenderá en las instancias internacionales oportunas.

En caso de conseguirlo, este símbolo canario se convertiría en la primera especie vegetal patrimonio de la humanidad y engrosaría la lista de Canarias que ya cuenta con cuatro bienes: dos de ellos en Tenerife, San Cristóbal de La Laguna y el parque nacional del Teide; y dos en La Gomera, el parque nacional de Garajonay y el Silbo Gomero.

En el ámbito local, el año pasado el grupo municipal Socialista propuso crear una comisión que se encargara de deliberar y proponer los actos que debían organizarse con motivo del centenario. La iniciativa quedó en el olvido hasta marzo de este año que se acordó su constitución. Está formada por representantes de los distintos grupos políticos en el Ayuntamiento, el cronista oficial de la ciudad, José Fernando Díaz Medina; el profesor Álvaro Fajardo; un representante del comité técnico del Drago, Juan Manuel Zamora; y otro del Centro de Iniciativas Turísticas (CIT), que en este caso es su presidente, Antonio Fleytas.

Aunque tarde, esta comisión es la encargada de diseñar los actos que se llevarán a cabo en lo que queda del año coincidiendo con el aniversario de su centenario entre los que se incluyen videos, jornadas de puestas abiertas, concurso de prosas, charlas, y exposiciones para escolares, entre otras. Aunque de momento, y faltando tan solo dos meses para acabar el año, solo son propuestas a la espera de que el nuevo grupo de gobierno las retome.

Este ejemplar de Dracaena Draco tiene 22 metros de altura, 10 metros de perímetro de tronco y un peso que se estima cercano a las 140 toneladas. Es uno de los seres vivos más longevos del planeta, con una antigüedad estimada de mil años y ha sido considerado por los guanches como un árbol divino.

Diez razones

Álvaro Fajardo elaboró un texto que sirvió de antesala para defender la propuesta de la senadora. En el mismo, expone diez razones que justifican la declaración por parte de la Unesco. Entre ellas, se incluyen que el árbol es un ejemplo representativo de la tradición cultural de los guanches; un espécimen único de un paisaje vegetal relicto que ha ilustrado períodos significativos de la historia; y un elemento destacado de asentamiento humano, ya que en su entorno se construyó una ermita advocación a San Marcos, y las primeras viviendas de Icod.

Además, está material y espiritualmente asociado con acontecimientos, tradiciones vivas, ideas, mitos y creencias, y ha sido, es y seguirá siendo, inspiración para escritores y artistas de todo el mundo.

Fajardo añade que el singular árbol representa un fenómeno natural-vegetal de belleza y estética incomparable al ser un ejemplar único y representativo de procesos biológicos en curso, en la evolución y desarrollo de ecosistemas y especies vegetales primigenias. En su entorno se han creado hábitat naturales para la conservación in situ de diversidad biológica de especies amenazadas, con un valor vegetal universal para la ciencia y la conservación.

El drago tiene la protección jurídica, administrativa y científica que garantiza y asegura su conservación en el espacio y el tiempo, hasta que la naturaleza quiera. En 1992 se creó el Comité Técnico de Conservación que vela por su buena salud.

Por último, y de lo que no hay dudas, es que el drago es una seña de identidad de canaria, que está presente en la heráldica y toponimias del Archipiélago.

Riesgo de ser cortado

En 1916 Roque Fleytas y Pérez estuvo a punto de cortar el drago, ubicado en la finca de su esposa, “porque le molestaba”. En ese tiempo un naturalista inglés que visitaba la Isla fue a Icod para estudiar el famoso ejemplar. Al enterarse que corría riesgo se interesó no sólo por el árbol sino que además quiso conocer a su dueño. “Para qué?”, le preguntaron sorprendidos los vecinos. “Para pedir su retrato y publicarlo en alguno de los periódicos ingleses ilustrados, poniéndole al pie: Fulano de Tal, canario civilizado aún, que acaba de cortar el más hermoso drago de Tenerife”, respondió.

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