Desafortunadamente, la peor de las noticias se confirmó ayer tras aparecer a 3.000 metros de altura en Las Cañadas del Teide un cuerpo sin vida que, a falta de la confirmación oficial de los forenses, todo apunta a que se trata del triatleta tinerfeño Víctor Martín Teni, desaparecido desde el 1 de enero de 2014. El atleta de 39 años subió al Parque Nacional durante aquel día de año nuevo. Había invitado a varios amigos a entrenar pero, al no aparecer nadie, decidió hacer la ruta solo.
Dejó su vehículo estacionado en las cercanías del Parador de Turismo en el Llano Ucanca, y tenía previsto pernoctar en el Refugio de montañeros situado cerca del Parador. Al día siguiente de que se le perdiera la pista, Teni tenía previsto incorporarse a su puesto de trabajo. Una senderista de Gran Canaria que se cruzó con él mientras ascendía el Pico Viejo fue la última persona en verlo con vida, desde entonces ya no se supo nada de su paradero.
La denuncia interpuesta por los familiares provocó la activación de un dispositivo de búsqueda y rescate en el que tomaron participaron más de 250 personas entre el Equipo de Montaña de la Guardia Civil, Cruz Roja, personal del parque nacional, helicópteros del Gobierno de Canarias, además de más de un centenar de voluntarios, compañeros y amigos.
Las labores de búsqueda sólo se interrumpieron esos días durante la noche debido a las bajas temperaturas y la falta de luz. El rastreo se vio dificultado por la nevada que cayó el día 2 de enero y la orografía del Parque, con la existencia de laderas y oquedades en las que el acceso es muy complicado. Se peinaron las más de 19.000 hectáreas del parque nacional sin éxito, y el rastreo de las cuevas y tubos volcánicos tampoco ofreció resultados satisfactorios.
La familia no se dio por vencida en ningún momento. Inició una campaña en las redes sociales para que se permitiera al Ejército participar en su búsqueda, como así ocurrió, y una vez finalizado el operativo oficial de rastreo, continuaron durante varios meses subiendo al Teide con la esperanza de encontrarlo
Las pesquisas realizadas por agentes de la Guardia Civil ratificaron la declaración de la senderista grancanaria que se cruzó con el triatleta en la ruta del Pico Viejo. Su descripción física y de la ropa que llevaba el deportista era la correcta y, además, el rastreo de la señal del móvil de Teni, hasta que se agotó la batería, ratificó que el último lugar por donde pasó fue ese sendero.
Durante todo este tiempo, los familiares del deportista adoptaron una actitud de discreción y buscaron salvaguardar su intimidad. Varios de los amigos de Víctor Teni señalaron ayer su desaparición “no se explicaba sin que concurriera un accidente o una desorientación”. El amplio número de personas que buscó a Víctor hace tres años permitió rastrear “hasta los lugares más recónditos por donde, a priori, ni siquiera tenía que haber pasado durante su entrenamiento o acceso al refugio”. Dentro de la desgracia que supone encontrar su cuerpo sin vida el hallazgo “resuelve un enigma que nos preocupaba a todos los montañeros, el no saber qué había pasado”. Se ha desvelado esa incertidumbre y muchas incógnitas. Ahora la familia podrá darle sepultura y descansar en paz.
Pionero en Hawai
Víctor Teni, nacido el 12 de febrero de 1973, era muy querido en el mundo del triatlón, las carreras de montaña y las pruebas populares. Miembro del club de natación Alameda de Santa Cruz de Tenerife, fue el primer triatleta tinerfeño que pudo clasificarse y participar en el prestigioso Ironman de Hawaii, en Kona. Además, subió al Himalaya en bici, estuvo en la Patagonia, en el Maratón del Sahara, y participó en decenas de triatlones en las islas, península o el extranjero.
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