Santa Cruz cuenta con algo más de una treintena de sedes municipales que son accesibles en distintos grados. De ellos, solo 14, lo serán completamente antes del 4 de diciembre, fecha tope para que las administraciones públicas adapten sus edificaciones a la ley de accesibilidad. Esto supone, como admitió el concejal de Accesibilidad, Carlos Corra que, “a partir del 4 de diciembre puede haber sanciones por que no se ha cumplido con la accesibilidad universal en todas las sedes”.
Correa, informó ayer, de que, la intención del Ayuntamiento es que en el primer trimestre de 2018 estén todos los proyectos en marcha y que este año, antes de la fecha tope, estarán adjudicadas todas las obras para esas 14 sedes que sí van a cumplir.
Según detalló el edil, este año se han centrado en adaptar las Unidades de Trabajo Social (UTS) y las oficinas de distrito. “Más no hemos podido correr”, aseguró Correa, quien recordó que cuando él llegó a la Concejalía en 2015 el presupuesto para Accesibilidad era de cero euros. “Para el año que viene el presupuesto crece el 28%, pasando de 900.000 euros a 1.200.000”, explicó. El grueso de ese presupuesto se va a ir a dos proyectos concretos; la mejora de las principales arterias de la ciudad en cuanto a accesibilidad y la mejora de los rebajes de acera por todo el municipio. Habrá continuidad con proyectos como el e-visual que permite a las personas sordas el uso de las oficinas municipales con mayor eficiencia, un servicio que se ha mancomunado con el Ayuntamiento de La Laguna porque “nos sale más barato”.
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