Una de las medidas estrella de la campaña de impuestos en pago voluntario de este año fue la del denominado IBI social, una ayuda que bonifica el 100% el pago de la contribución a las familias de escasos recursos y siempre que el valor castatral de su vivienda no supere los 40.000 euros. El anuncio de la entrada en vigor de esta ayuda se hizo casi por sorpresa el pasado junio y con la campaña de recaudación voluntaria ya iniciada. Esta premura es la que ha evitado que el número de beneficiarios sea mayor. Según los datos de la Concejalía de Hacienda, al frente de la que está el nacionalista Juan José Martínez, el monto total de estas ayudas es de 12.000 euros, cifra que se han podido ahorrar las familias que han accedido a esta medida. Martínez reconoció que esa cantidad es muy pequeña, “menos de la que nos gustaría”. No hay que olvidar que la Concejalía había calculado que un millar de familias chicharreras podían acogerse a la ayuda. “En este caso, tenemos que dar la razón a la oposición cuando criticaron la falta de tiempo para dar a conocer la aplicación de esta ayuda”. “Por ello -continuó el concejal-, el próximo año haremos un esfuerzo comunicativo mayor para que todas las familias que tienen derecho a esta bonificación sepan de su existencia y puedan acogerse a ella”.
El presupuesto con el que contaba la Corporación para aplicar la iniciativa era de 200.000 euros y el número exacto de familias a las que alcanzaría era de 1.100. La puesta en marcha de esta ayuda convierte a Santa Cruz en uno de los primeros municipios de España en aplicarla. Así, los propietarios de una vivienda que se han acogido a esta ayuda directa debían haber percibido alguna prestación económica del Instituto Municipal de Atención Social (IMAS) en el ejercicio anterior y el valor catastral del inmueble, como se ha apuntado, no alcanzar los 40.000 euros.
Proyecto piloto
“En total se presentaron 60 solicitudes, pero seis fueron rechazadas por presentarlas fuera de plazo y seis más por no ser perceptores de ayudas del IMAS, tal y como se indica en las bases de la convocatoria”, detalló Martínez a DIARIO DE AVISOS. “Este año -continuó- podemos decir que ha sido el proyecto piloto y confiamos en que en el ejercicio económico de 2018 sean muchas más las familias a las que alcance la bonificación del 100% en el pago de la contribución”.
Esta misma semana, el Ayuntamiento presentaba su proyecto de presupuestos para el próximo año, un plan económico en el que el área de Asuntos Sociales crece en el 30%, con 4 millones adicionales respecto a 2017. En concreto, el IMAS contará con un presupuesto de 18,2 millones de euros, en el que se incluye el destinado a la implementación de esta ayuda.
Según el anuncio que el Consistorio hizo en junio, a las familias que ya hubieran abonado el IBI antes de la puesta en marcha de la bonificación se les abonaría en su cuenta el importe correspondiente al impuesto, siempre y cuando cumplieran con los requisitos. La iniciativa se tramitará el próximo año, igual que se hizo este, de forma simplificada a través de Viviendas Municipales.
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