Un vídeo grabado en 2014 con una cámara oculta muestra a un anciano, veterano de la Segunda Guerra Mundial, pidiendo ayuda en una residencia mientras las enfermeras se reían de él.
El vídeo muestra cómo James Dempsey, de 89 años de edad, pide ayuda en varias ocasiones porque no puede respirar. Inmediatamente después se escucha a las enfermeras riéndose, primero ignorándole y después tratando de poner la máquina de oxígeno en funcionamiento.
La familia del anciano había decidió esconder una cámara en la habitación del Centro de Cuidado y Rehabilitación de Atlanta y precisamente grabó la noche en la que James falleció.
La familia demandó a la residencia y llegaron a un acuerdo. Las enfermeras aseguraron en el juicio que en cuanto se dieron cuenta de que el anciano había dejado de respirar fueron a ayudarle, sin embargo el video demuestra que no hicieron nada por salvarle la vida.