Gerónimo Rauch guarda muy buenos recuerdos de Tenerife. Fue aquí donde vio por primera vez a su hijo, a través de una ecografía, durante unas vacaciones con su pareja. El que ha dado voz a personajes tan emblemáticos como Jesucristo, en Jesucristo Superstar, Jean Valjean, de Los Miserables, o Mary Sunshine, en Chicago, ahora se prepara para meterse en la piel de Joe Gillis, protagonista de Sunset Boulevard, la nueva propuesta de Auditorio de Tenerife, dirigida por Jaime Azpilicueta y coprotagonizada por Paloma San Basilio, en el papel de la popular Norma Desmond. Un musical que se estrenará en el recinto capitalino el próximo 27 de diciembre y que permanecerá en cartelera hasta el 4 de enero.
-¿Cómo han ido los primeros ensayos de Sunset Boulevard?
“Han sido muy intensos. Estamos montando una obra en tiempo récord. Generalmente se necesitaría el doble de semanas para dar forma a algo así. Trabajamos con el vértigo de hacer las cosas con las prisas pero manteniendo la calidad. Queremos hacer un musical con la excelencia como marca”.
-Cuando le ofrecen el papel en el musical, ¿cuál fue su primera reacción?
“Siempre es una alegría que te elijan para algo así. En ese momento, yo estaba en Argentina y fue un placer aceptar la invitación”.
-¿Qué tal compartir escena con Paloma San Basilio?
“Nosotros, por suerte, nos encontramos en septiembre. Entonces hicimos como un primer ensayo junto a Jaime Azpilicueta. Fue maravilloso”.
-Hace unas semanas ella misma confesaba que ese encuentro le sirvió para meterse a Norma Desmond en la piel. ¿Le ocurrió lo mismo?
“Todavía estoy intentando meter a Joe Gillis en mi piel. Soy el que relata la historia y estoy mucho tiempo en escena y aún no tengo todo muy claro. Yo siempre espero que el personaje me sorprenda, y sí, es verdad que llega un momento en el que se apodera de ti. Pero todavía tengo mucho que aprender de este”.
-Estuvo en Argentina presentando su nuevo álbum en solitario, Songbook…
“Sí, estuve presentando un espectáculo nuevo con las canciones de mi disco en el teatro Colón y en Luna Park. Estoy feliz con los resultados”.
-¿Este trabajo en solitario le ha hecho cambiar el rumbo?
“Cambia el rumbo pero no del todo. Sigo trabajando en el teatro musical y estoy combinándolo con mi carrera en solitario. Quería sacarme las ganas de actuar y también las de cantar. En Latinoamérica fue un éxito que me ha motivado a pensar en un nuevo disco”.
-Sale del talent show Popstars, como Operación Triunfo, luego gana muchísimo éxito con el grupo Mambrú en Argentina. ¿Cómo acaba en el mundo del musical en Europa?
“Ya en Argentina había hecho Jesucristo Superstar y Greease. Después me presenté al Operación Triunfo de Argentina. Por suerte tuve la oportunidad de representar los papeles más emblemáticos del mundo del musical a mi llegada a Europa. Siempre que pienso en todo lo vivido, me emociono”.
-¿De Argentina salta directamente a Londres, o antes pasó por España?
“Primero en España hice Jesucristo, un papel del que no me pude separar entre 2007 y 2009. Después hice Chicago en Madrid y, más tarde, Los Miserables. De ahí salté a Londres”.
-En España, el teatro musical está tomando mucha relevancia en los últimos tiempos. ¿Queda todavía mucho por hacer para llegar al nivel de Londres o vamos por buen camino?
“En estos momentos España está teniendo la cartelera teatral musical más importante de su historia. Desde musicales como El Rey León, Billy Elliot, Priscila, es impresionante toda la oferta que hay y la cantidad de público que se fideliza al género. Además, somos cada vez más los artistas que nos dedicamos a esto. En Londres hay una tradición de décadas y décadas, pero podemos afirmar que España es la segunda capital europea del musical”.
-En esa inversión y apuesta por el teatro musical destaca la que está haciendo ahora Auditorio de Tenerife, que ya ha llevado a escena obras como My fair lady o Evita. ¿Cómo ve usted este apoyo desde la isla al desarrollo de este género?
“Es una apuesta maravillosa que agradecemos todos los artistas que nos dedicamos a esto. Poder producir y crear trabajo para tanta gente, con productos de tanta calidad en España desde Tenerife, es algo que hay que valorar. Todos los isleños deberían acompañarnos en este nacimiento del musical que seguro recorrerá la Península y Latinoamérica. Hay que pensar que los isleños tendrán el privilegio de ver nacer este proyecto”.
-De todos los musicales en los que ha participado, ¿de cuál guarda mejor recuerdo?
“Todos me han enseñado y me han hecho crecer en algún sentido. No obstante, el musical que me abrió las puertas al mundo fue Los Miserables. Fue mi primer trabajo en el 2000. Luego lo protagonicé en 2010, en España, y en 2012, en Londres. Ha sido el musical de casi toda mi vida”.
-¿Le queda algún personaje pendiente?
“Me gustaría mucho trabajar en el musical de Doctor Jekyll y el señor Hyde. Es mi cuenta pendiente. Pero hay muchos nuevos personajes, de creación propia, que hay que tener en cuenta y hay que fomentar”.
-Usted participó en un talent show en Argentina que le dio un impulso a su carrera. Ahora en España vemos el retorno de Operación Triunfo. ¿Este tipo de programas abre puertas?
“Yo no veo la televisión, entonces me lo pierdo todo, pero creo que los artistas son los que se labran su propia carrera y los que, al final, no dependen de los realities. Para mí fue tan solo un paso más en mi carrera. No solo estoy yo como ejemplo, en España tenemos el caso de David Bisbal o Pablo López. Así que hay que verlo como un trabajo, una oportunidad para exponer nuestro arte y como se dice en Argentina, en la cancha se ven los pingos, al acabar el programa, el que sobrevive es el que tenía que sobrevivir”.
-De 2012 a 2015 reside en Londres dedicándose al musical. ¿Un sueño hecho realidad?
“A nivel emotivo fue muy especial ver mi foto en la entrada de los teatros. Allí trabajan a un nivel muy alto, lo que proporciona mucho placer y aprendizajes. Trabajaría de nuevo allí, pero dependiendo del proyecto porque quiero vivir en España con la familia. Si surge un musical que no me puedo perder, me pensaría cambiar de residencia”.
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