Cuando La Palma recupera el pulso turístico y los datos, en general, son halagüeños, esta campaña de Navidad representa un primer bache ante la escalada que venía experimentando el sector en los últimos tiempos. Al menos así lo ponen de manifiesto los datos ofrecidos por la patronal hotelera de la provincia, que estima una caída de 10 puntos con respecto a este mismo período en 2016.
En concreto, Ashotel prevé una ocupación media del 84% frente al 94% de las Navidades pasadas, según la encuesta realizada en los establecimientos hoteleros y extrahoteleros de la provincia.
Este descenso puede ser incluso más grande que los datos aportados por Ashotel, teniendo en cuenta que la encuesta se realizó antes del anuncio de la quiebra de Niki, la aerolínea de bajo coste de Air Berlín, que tenía contratadas unas 3.800 plazas mensuales con La Palma.
Entre los motivos de la caída en las previsiones, según explica esta entidad, señalan la alta expectativa generada con este destino el año pasado, aunque finalmente no fue tan favorable. Prueba de ello es que la ocupación real en las Navidades de 2016 fue del 90% según la encuesta de Ashotel, frente a la previsión del 94%.
¿Estamos ante un tropiezo coyuntural o puede obedecer al inicio de una tendencia negativa? La consejera insular de Turismo, Alicia Vanoostende, defiende que los datos hay que observarlos a más largo plazo para tener una muestra fiable de la tendencia del turismo y asegura que la temporada de invierno está marchando “bien”.
La consejera reconoce que es difícil superar el “éxito” cosechado la pasada Navidad y advierte de que a pesar de que en los datos de ocupación hay un descenso, también existen otros factores en estas fechas festivas que apuntan a una lectura más optimista, como el hecho de que por primera vez ha habido garantías de camas con antelación y los precios medios por noche se han incrementado en la isla de La Palma.
En cualquier caso, la consejera asegura que continúan trabajando para fortalecer la promoción turística en el exterior, contando para ello, por primera vez, con agencias especializadas.
Por contra, el Partido Popular sostiene que esta caída es fruto de una fallida promoción turística por parte del grupo de Gobierno insular. El consejero Raúl Camacho señala que su partido venía advirtiendo de esta situación desde el inicio del mandato. “No vale solo conseguir los vuelos, sino que para que se mantengan tenemos que trabajar en los destinos para ocupar esas plazas aéreas”, añade.
En esta línea indica que hay compañías que realizan operaciones con el aeropuerto de La Palma que apenas cumplen con el 60% de ocupación. “Así nos encontramos con la dura realidad de que mientras otros destinos, como mínimo, se mantienen en elevados porcentajes de ocupación respecto al año anterior, La Palma baja entre un 10% y un 15%”.
Raúl Camacho, que estuvo el pasado mandato al frente del área de Turismo del Cabildo palmero, augura que, “desgraciadamente, esta línea va a continuar”. “Se vendían muchas expectativas y es puro humo”, comenta el consejero, quien insta al Gobierno a “cambiar la política turística de la isla, porque si no seguirá ocurriendo como sucede esta campaña de Navidad, con un descenso continuo de la llegada de visitantes a La Palma”.
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