El Cabildo de Tenerife comenzó en la noche del domingo el asfaltado de nuevos tramos en las dos autopistas, unos trabajos que forman parte de la inversión -más de 23 millones de euros- para regenerar el estado de deterioro en que se encuentra el firme de estas arterias viarias por las que circula una media diaria, entre las dos, de 180.000 vehículos.
Las actuaciones que se desarrollan en la TF-5, consistentes en colocar la capa de rodadura en los 13 kilómetros del tramo que une Santa Cruz (desde los túneles de Tres de Mayo) hasta La Laguna (aeropuerto Tenerife Norte), dado que afectan a los cuatro carriles de subida de forma simultánea, hacen que la incorporación a la vía sufra desvíos. Así, anoche se cerró el túnel de Tres de Mayo y el acceso por la piscina. En ambos casos, la incorporación a la TF-5, en sentido ascendente, se realizó por Somosierra. Estos mismos cortes se tendrán lugar hoy. A las 06.00 horas de mañana se podrá acceder con normalidad a la autopista.
Mientras, en la TF-1, ya desde anoche se acometen las obras de asfaltado en nuevos tramos de la autopista en sentido sur. Entre los kilómetros 61 y 62 (Aeropuerto-Chafiras) se reducirá la velocidad a 80 kilómetros por hora, porque, como ya ocurriera la semana pasada en el tramo de Guaza a Parque de la Reina, debido al desgaste intenso en que se encuentra el asfalto la obra se tiene que realizar en varias fases, pues en la retirada del firme hay que profundizar 20 centímetros.
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