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El cambio radical que dejó irreconocible a María Teresa Fernández de la Vega

El cambio radical de María Teresa Fernández de la Vega (69 años) ha dejado a muchos descolocados
El antes, durante y después de María Teresa Fernández de la Vega. / EL ESPAÑOL

El cambio radical de María Teresa Fernández de la Vega (69 años) ha dejado a muchos descolocados. La socialista se presentó este martes, en un viaje oficial a Letonia junto al primer ministro saliente Maris Kucinskis, totalmente irreconocible, con la cara hinchada, los ojos hundidos, sin tantas arrugas y con apenas movilidad en sus gestos. Todo parece indicar que la política había pasado por el quirófano una vez más para hacerse unos cuantos retoques.

En el año 2004, con su llegada a la vicepresidencia del Gobierno de España, María Teresa era una mujer de mediana edad, interesada en la industria de la moda como cargo público y también como consumidora. Precursora de los colores flúor y el corte de pelo pixie, aunque aún sin haber sometido a su rostro a ningún tratamiento patente, según afirma la reputada cirujana Barba, consultada por EL ESPAÑOL.

Entre las operaciones que posiblemente se ha practicado María Teresa Fernández desde 2004 se pueden enumerar: el lifting facial, la blefaroplastia para eliminar el excesos de piel en los párpados, tratamientos de láser facial para estirar la piel y eliminar las arrugas, bótox o toxina botulínica y el ácido hialurónico o tratamiento con grasa.

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