Dos de las cantantes más extravagantes del panorama internacional parecen haber hecho los paces con una imagen que ha dado la vuelta al mundo.
Lady Gaga y Madonna eran enemigas acérrimas, sobre todo, por parte de esta última, que no ha querido mantener una buena relación con la recién galardonada a Mejor Canción Original por Shallow, en la gala de los Oscar 2019.
Al parecer, la protagonista de Ha nacido una estrella acudió a una fiesta privada organizada por Madonna después de recoger su aclamado premio reconocido por la industria del cine.