El alcalde de Santa Cruz, José Manuel Bermúdez, no espera más. Han sido 48 horas en las que la opción de que el Carnaval de Santa Cruz se quedara sin espacio para la celebración de galas y concursos fue una realidad. El Puerto se niega a ceder la Dársena de Los Llanos para instalar el escenario de la fiesta. Esa fue su postura en la reunión Puerto-Ciudad del pasado martes, y de ahí solo se ha movido hasta ceder el suelo durante 45 días y no 60, como pide el Ayuntamiento, y eso con la intermediación del presidente del Cabildo, Pedro Martín, a petición de Bermúdez. “Cuando comprendí que la negativa tenía un origen político pedí al presidente del Cabildo que intermediara”, explica Bermúdez en esta entrevista con DIARIO DE AVISOS, en la que acusa al presidente de la Autoridad Portuaria (Carlos González) de no decir la verdad cuando habla de afectación a la operativa portuaria como motivo para negar el uso de Los Llanos. “Eso no es verdad. No es cierto. Es una decisión política. Es la primera vez que el Puerto le dice no a la ciudad, porque decirle no al Carnaval es decirle no a Santa Cruz”.
-¿Qué pasó en la reunión del pasado martes con el Puerto?
“Nosotros queríamos hacer el Carnaval en febrero, en el Recinto Ferial. Al tener que trasladarlo a junio por la pandemia, el Cabildo nos dice que el Recinto Ferial no podía acoger el Carnaval porque estaba ocupado, concretamente con Gastrocanarias. Como consecuencia de eso nosotros propusimos al Puerto que se hicieran los actos del Carnaval, es decir, galas y concursos, en un sitio donde siempre había accedido a hacer actividades culturales o deportivas. Un sitio que no supone ningún tipo de problemas de operatividad al puerto y donde además el Ayuntamiento paga el suelo y garantiza todos los gastos. Con ese planteamiento técnico, que no es la primera vez que se realiza, porque en esa zona se ha hecho el concierto de Navidad o el de Raphael, nos fuimos al Puerto. Y lo que nos encontramos es que, por primera vez, un presidente de la Autoridad Portuaria le dice que no a la ciudad, al Ayuntamiento, a hacer algo ahí. Esto no había ocurrido antes, y es un no categórico. Los que estábamos en la reunión vimos que no había posibilidad de negociación”.
-Aun así, usted se ha mantenido en silencio estos dos días, en aras de que el Puerto recapacitara, algo que no ha sucedido…
“Yo me he mantenido durante este tiempo en una actitud prudente esperando que la Autoridad Portuaria reconsiderara su postura. Mi teléfono ha estado abierto las 24 horas, pero no he recibido ninguna llamada, ni una explicación, ni justificación alguna, ya sea técnica o de operatividad. Así que la única justificación que encontramos es la política, y el Carnaval de Santa Cruz no se merece un no político, porque el Carnaval debe estar por encima de la política y de los partidos”.
-Entonces, no cree usted al Puerto cuando dice que no puede tener ocupada la dársena durante 60 días porque afecta a la operatividad portuaria…
“Eso no es verdad. No es cierto. Es una decisión política. Nosotros, desde hace seis años, ponemos ahí un aparcamiento toda la Navidad, que lo costea el Ayuntamiento, y para eso nunca ha habido problemas. Estoy convencido de que si quisiéramos poner un parking en junio durante dos meses, tampoco habría problemas, pero para las galas y concursos del Carnaval, sí. Se nos dice que no a un recinto acotado, vallado, con normativa COVID, medidas de seguridad… Eso es un no que no está apoyado en ningún informe técnico. Allí no ocurre nada desde el punto vista operativo”.
-¿Eso es algo que le constatan desde otros ámbitos del Puerto?
“Nosotros hablamos con la comunidad portuaria, que es mucho más que el presidente del Puerto, y son los primeros que te dicen que ahí no se hace nada de su actividad. Así que lo que está ocurriendo es muy grave. Es la primera vez que se nos dice que no de esta manera, a la ciudad, no al Ayuntamiento, porque decirle que no al Carnaval es decirle que no a la ciudad”.
-¿A qué cree que obedece este cambio de actitud?
“Esto es un tema absolutamente político. Y que conste que yo llamo al presidente del Cabildo de Tenerife el mismo día que se me dice que no. Le llamo y le digo que, por favor, busquemos una solución entre todos porque el Carnaval es la única fiesta de Canarias de carácter turístico internacional y creo que no solamente es un patrimonio de Santa Cruz, sino de toda la Isla. Soy yo el que intenta que no se convierta en un tema político, algo en lo que lo ha convertido el presidente del Puerto”.
-El resultado de esa intermediación es que el Recinto Ferial vuelve a estar sobre la mesa…
“Exacto. El presidente del Cabildo de Tenerife me llama y me dice dos cosas. La primera es que el presidente del Puerto dice que nos cede el suelo durante 45 días, cuando sabe perfectamente que no podemos montar, hacer las actividades y desmontar en ese tiempo. Me está dando una opción que no es posible. La segunda opción que me da ahora el Cabildo, si rodamos Gastrocanarias, pues a lo mejor podemos hacerlo. Entonces si el Recinto Ferial me dice que sí, y entre todos buscamos una solución, pues encantado, pero eso hace un mes no era así”.
-Entonces el Cabildo de Tenerife entendía como el Ayuntamiento que hace un mes la opción de la Dársena de Los Llanos era lo suficientemente factible para no tener que mover nada en el Recinto Ferial…
“Por supuesto. Nadie pensó que nos iba a decir que no el presidente de la Autoridad Portuaria. Nosotros sabemos, porque tenemos relación técnica con la comunidad portuaria, que es posible, y lo que no ha habido es una voluntad política, lo que ha habido es una posición política sectaria”.
-¿Cuál es la situación ahora?
“Nuestra posición es que 45 días no nos vale. Entonces, si el presidente del Cabildo nos dice que podemos volver a la opción del Recinto Ferial moviendo fechas y ajustándonos un poco, casi diría que es la mejor opción”.
-¿Afecta esta negativa a la relación general con el Puerto?
“Esto claro que afecta. Y que conste que yo voy a mantener siempre una actitud colaboradora, de estar a la altura de las circunstancias. Siempre he estado en esa actitud, y voy a seguir estando a la altura de las circunstancias porque no me puedo permitir que temas personales influyan en mi trabajo político. Yo tengo que estar al servicio de la economía de la ciudad y el Puerto es la principal economía de Santa Cruz”.
-Cuando habla de que es un tema político, ¿por qué cree que hasta ahora no se había plasmado?
“La cosa es muy sencilla. Solo hay que mirar para detrás. Ver todas las veces que se permitió y quiénes gobernaban en la Autoridad Portuaria. Cuando gobernó el PSOE en Santa Cruz se les autorizó el concierto de Raphael. El aparcamiento lleva seis años autorizándose, así que no es nuevo. Y nosotros pedimos autorización para un tema excepcional y puntual como es el Carnaval este año”.
-¿Habrá Carnaval en junio?
“El Carnaval lo vamos a hacer cómo sea, eso está claro. La pandemia es lo único que lo puede parar”.