
El Cuadrilátero lagunero o la Plaza de España, en Santa Cruz, fueron el campo de batalla escogido por varios jóvenes para desplegar toda su violencia el pasado fin de semana. Con el objetivo de que estas escenas no vuelvan a repetirse, el gobierno de la Ciudad de los Adelantados ha decidido imponer controles en los cuatro puntos de entrada a la famosa zona de ocio del municipio e impedir el acceso de los menores a la misma, mientras que el consistorio capitalino ha optado por aumentar la presencia policial en las calles, en colaboración con la Policía Nacional.
Así lo ha confirmado este martes la concejala de Seguridad del Ayuntamiento de Santa Cruz, Evelyn Alonso, en los micrófonos de Cope Tenerife, donde ha querido mandar un mensaje de “tranquilidad” a la ciudadanía, en relación a lo sucedido en la Plaza de España. Le edil ha vinculado estas reyertas con la presencia de menores migrantes en la capital. “Debemos tener en cuenta que hay varios hoteles destinados a acoger menores migrantes […] que tienen una circulación libre por la ciudad”, matizó. Y puso como ejemplo otra pelea entre jóvenes senegaleses y marroquíes que se saldó con un “apuñalado”.
“QUEDAN PARA PEGARSE”
Por su parte, el delegado del sindicato CSIF en el Consistorio capitalino, Jesús Illada, también mostró su preocupación por la reyerta multitudinaria que tuvo lugar este fin de semana en Santa Cruz de Tenerife. “Son quedadas que se hacen a través de redes sociales y que producen desasosiego entre la ciudadanía, ya que se crea inseguridad y un ambiente poco propicio para la vida familiar”, aseguró ante los micrófonos de Cope.
El portavoz explicó que “lo que pasa es que, aunque nos concentramos, no damos avío. Además, el resto de la ciudad queda desprotegida, pues el grueso del personal se tiene que quedar en los puntos conflictivos durante horas porque los menores vuelven a pelearse a la mínima”.