santa cruz

Sol, tradición y muchas ganas de volver a la vida de antes en el Parque García Sanabria

El parque García Sanabria vive un sábado intenso, de buen tiempo y gran ambiente, en la vuelta de la emblemática Exposición de Flores, Plantas y Artesanía, y la Feria del Libro
Parque García Sanabria
Parque García Sanabria
Sol, tradición y muchas ganas de volver a la vida de antes en el Parque García Sanabria. SERGIO MÉNDEZ

Tras dos años viviendo marcados por la pandemia y sus restricciones, la gente tiene muchas ganas de volver a la vida de antes, y se nota en la calle. El santacrucero parque García Sanabria vivió ayer uno de los días más intensos de la celebración de su 45 edición de la Exposición de Flores, Plantas y Artesanía de las Fiestas de Mayo, junto a la Feria del Libro, en una jornada de sábado marcada por el buen tiempo y ambiente, con muchas familias, chicharreros y visitantes, y la recuperación de las tradiciones en este emblemático escenario de las fiestas fundacionales. Todo envuelto por las ganas de dejar atrás los tiempos COVID.

“La verdad es que está todo muy animado, la gente quiere salir, quiere volver a reencontrarse. Creo que hay tantas ganas de recuperar la normalidad que es como si nos hubiésemos olvidado de estos dos años de parón, y creo que esa es la sensación. El flujo de asistencia es bueno, y para nosotros es una alegría”, explicaba ayer Mónica Brito, mientras atendía su floristería Merci Bouquet, una de las cuatro que participan en la exposición, a pleno rendimiento.

“Obviamente como floristería tenemos muchas cosas por hacer y estamos muy contentos, hemos recibido un primer premio de presentación en nuestro stand, donde tentemos un photocall con un vestido hecho con flores para que la gente participe, se haga una foto, lo comparta en redes y queremos premiar al mejor posado”, relataba.

Silke Endisch, de la familia propietaria de Geranios Tenerife, también atendía a la multitud de visitantes que se acercaba en búsqueda de una planta que regalar: “Nosotros llevamos viniendo desde el año 82. Ha sido estupendo volver, y la gente está muy animada a comprar, se ve que las plantas siguen siendo un regalo prioritario para las madres”.

La artesanía también tiene un lugar muy importante en la exposición, con 43 puestos, como el de Beni Zamora, costurera de trajes tradicionales y que ha recibido “con mucha alegría” la vuelta al parque. “Hay mucha gente y está muy bien, parece como si ya hubiésemos pasado todo. Estos dos años fue muy duro porque al no haber romerías ni nada, pues mi oficio estaba parado completamente. Ya está mejorando y la gente se está animando a comprar y ha habido bastantes encargos, la gente tiene ganas de salir de fiesta”, explicaba.

David Guijarro es artesano de la madera y desde su stand contaba que “vemos que ha habido una buena reacción del público a volver a hacer la feria en el parque, porque la feria es en el parque, no se puede hacer en otro lado. Y que puedas encontrar cosas interesante en oficios tradicionales, pues también hace que sea una feria referente. Se nota que la gente quiere disfrutar del parque y la feria”, aunque considera que “se nota un poquito a la gente reacia a las compras”.

Gorgorito

Una vuelta de las tradiciones que no solo se manifestaba a través de los puestos de artesanía, sino del regreso de actos como las actuaciones folclóricas en el entorno de la fuente principal o de las tradicionales funciones de títeres Gorgorito: Maese Villarejo y sus muñecos animados, que siempre se llenan y han visto tantas generaciones de chicharreros, como Paco Gómez, que trajo a su nieta a verlos.

“Desde mi época en que me traía mi abuelo, las tradiciones no las podemos perder”, explicaba este vecino, que manifestaba que suele venir por las Fiestas de Mayo. “Todos tenemos ganas de esparcirnos, de encontrarnos y este es un punto de encuentro muy bonito. Yo creo que esto es volver otra vez a unos tiempos que habíamos perdido, y esto no se puede perder porque aquí es el disfrute de abuelos, nietos,de la gente..”, contaba.

Pero la exposición también tiene espacio para la artesanía gastronómica, con 15 puestos de productos típicos, como los dulces y mojos de Liz Rivero, propietaria de Dulcería El Portillo. “Estamos con ilusión y contentos con el ambiente, porque ya volvemos otra vez a ser normales y veo a la gente con seguridad, que antes era el temor…”, señalaba.

Y también han vuelto los tradicionales turrones de todas las fiestas, como los del puesto de Francisco Pérez: “La gente está muy agradecida, tenían ganas de ver los turrones en las Fiestas de Mayo, como de costumbre, que ya llevamos más de 40 años viniendo”. Una actividad que se ha visto muy afectada por la pandemia porque “estábamos en casa sin trabajar, sin fiestas ni romería ni verbena, y a ver si vamos empezando poco a poco a remontar con las fiestas de los pueblos, que parece que la vida va cogiendo un poquito de color”, relataba.

Libros

Este año la exposición coincide también con la Feria del Libro, que contó con su propio espacio. “Alegría con mayúsculas, porque volvemos a estar en contacto con el público, como era antes, y sobre todo en este parque, que es maravilloso. Hay un ambiente genial, con los artesanos, las flores, los libreros.. y volvemos a las fiestas. Yo creo que hasta hay más alegría, desde el primer día nos sorprendió a todos los libreros que ya había gente, y el ambiente muy positivo, con las ganas y alegría que tiene la gente”, manifestaba Óscar Jiménez, propietario de Librería Ofra.

Una sensación compartida por Ana González, de Cuentos en la Cabeza: “La gente está con ganas, después de todo este tiempo… y eso ayuda también a que quieran comprar. Hemos venido en otras ocasiones en las que ha coincidido la feria de plantas y artesanía con la de los libros. A mí me gusta bastante porque el público puede pasar un día muy entretenido y variado, porque tienes de todo un poco y el parque que es maravilloso”. La feria y la exposición seguirán abiertas hasta el martes.

TE PUEDE INTERESAR