La Concejalía de Seguridad ha tenido que reorganizar los efectivos policiales para garantizar la seguridad en la celebración del Carnaval después de que los sindicatos, de forma mayoritaria, se hayan negado a reducir su periodo de descanso de las 12 horas a las 8, con el objetivo de darle forma al dispositivo que se anunció a mediados de abril, en el que la Guardia Civil, la Policía Nacional, la Policía Canaria y la propia Policía Local sumarían unos 500 agentes para la seguridad del Carnaval de calle.
En la reunión mantenida el pasado jueves con Recursos Humanos, tres de los cuatro sindicatos votaron en contra de sacrificar parte de su descanso para cumplir con lo solicitado por el Ayuntamiento, que no era otra cosa que acortar las horas de descanso entre turnos.
Según fuentes sindicales, la negativa obedece a que están “hartos” de que se “juegue” con su “salud y seguridad”, cuando el problema de la falta de personal es del Ayuntamiento. “Si quieren fiesta lo primero que tenían que haber hecho era saber si se podía garantizar la seguridad”, apuntan.
Denuncian que son más de 100 policías sin chalecos balísticos, sin cascos de protección antidisturbios, sin formación en grandes multitudes…”y encima pretenden que estén en plenas facultades psicofísicas sin descansar”.
Desde el Ayuntamiento de Santa Cruz confirman que ante esta negativa lo que se ha hecho es reorganizar los turnos de forma que se garanticen las 12 horas de descanso. Aseguran que no peligra la seguridad, aunque los sindicatos afirman que va a haber menos efectivos en la calle, apuntando que si era posible esa opción desde el principio, no entienden porque se les planteó reducir las horas de descanso.
Este mismo fin de semana, con diversos actos culturales y, sobre todo, el partido por el ascenso del Tenerife, asegura el Ayuntamiento que serán 240 los agentes que velarán por la seguridad para el partido de mañana.
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