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Una marea amarilla sale a la calle por “derechos sociales de calidad”

Cerca de 2.000 personas convocadas por el movimiento 15-S, en el Día Internacional de la Democracia, reúne a diferentes colectivos que rechazan el actual programa de prestaciones
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Foto: Sergio Méndez

Bajo el lema Los derechos sociales no se recortan, se defienden, una marea amarilla inundó ayer las calles de Santa Cruz de Tenerife. Convocadas por el movimiento 15-S, cerca de 2.000 personas exigieron derechos sociales “de calidad” y dejar claro su rotundo no a la privatización y externalización de los servicios que presta el tercer sector.

Es la primera vez que se celebra en Canarias y de manera simultánea en tres islas, Tenerife, Lanzarote y Gran Canaria, una manifestación para reivindicar y defender medidas justas y dignas para las personas que se dedican al sector de los cuidados de la sociedad.

Y también la primera en que diferentes entidades, asociaciones y colegios profesionales que luchan por los derechos sociales se unen con este objetivo en común y en contra del programa de prestaciones sociales que quiere aprobar el Gobierno de Canarias en el marco de la Ley de Dependencia, en el que, coincidieron, “no se ha tenido en cuenta el criterio y las aportaciones de las entidades y de los colegios profesionales, y tampoco los derechos de los mayores y las personas con discapacidad”, recalcó la directora de Acufade (Asociación de Cuidadoras/es, Familiares y Amigos/as de Personas con Dependencia, Alzheimer y otras Demencias), Elena Felipe, y representante de la plataforma.

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Una marea amarilla sale a la calle por “derechos sociales de calidad”. SERGIO MÉNDEZ

Eligieron, para ello, una fecha señalada, el Día Internacional de la Democracia, “para poner en valor que aquella democracia que tanto se publicita y se vanagloria está cuestionada. Mientras los derechos estén blindados, no hay democracia de la que se pueda presumir”, declaró Emma Colao, abogada y activista LGTBI+ transfeminista y una de las organizadores. Y lo hicieron con camisetas amarillas, el color corporativo de Acufade y el utilizado también por los pensionistas y varios movimientos sociales.

La movilización empezó a las 18.30 horas en la plaza Weyler y transcurrió hasta la plaza Candelaria, donde se expusieron las principales reivindicaciones de los integrantes y representantes de las entidades adheridas: los colegios oficiales de Trabajo Social de Santa Cruz de Tenerife y de Las Palmas de Gran Canaria, el de Psicología de las dos provincias de Canarias, la Asociación de Cuidadoras Acufade, Acampada por el Derecho a la Vivienda, Adissur, la Asociación Canaria de Personas con Trastorno de Desarrollo Generalizado (Actrade), Madres por la Discapacidad, Somos Red, Asamblea en Defensa de Nuestra Tierra, la asociación Laurisilva y Asamblea 7 Islas, entre otras. Pero también muchos ciudadanos que quisieron apoyar la lucha del sector y la falta de protección a la tercera edad.

Al finalizar, los organizadores no pudieron ocultar su satisfacción por el poder de convocatoria. “Estamos muy contentas con la respuesta social. Generar un discurso común y empezar a organizarnos es un trabajo que empieza. No acaba hoy. El 15-S ha venido para quedarse y la línea de actuación va a ser directa para la fiscalización de los derechos sociales”, declaró Olga Rocío, portavoz de la plataforma de Usuarios de Residencias de Mayores de Tenerife.

En la misma línea se expresó Emma Colao. “Ha sido nuestra primera acción, que el pueblo supiera por qué se había creado el movimiento 15-S y cuál era su finalidad”.

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