La espectacular foto de Rusela Rodríguez del oleaje de estos días en Bajamar, en la isla de Tenerife, muestra en todo su esplendor la fuerza y la belleza de la naturaleza. Pero esa belleza natural encierra también un gran peligro, como ha quedado de manifiesto en la semana negra sufrida en Canarias: tres muertos a causa del fuerte oleaje y cuatro personas rescatadas en apuros.
Cruz Roja y Salvamento Marítimo recuperaron el martes el cuerpo sin vida de una persona en la costa de El Sauzal. El jueves, día 3, un joven de 18 años murió y su padre resultó afectado de gravedad en Los Patos, en La Orotava.
El lunes fueron rescatados dos pescadores que cayeron al mar en Garachico. Y en Gran Canaria, el viernes murió otra persona en la playa del Pirata. Con el mar no se juega.