Por mucho que el azar provocó que los efectos derivados de la cercanía a Canarias de una borrasca finalmente no tuvieran apenas relevancia durante el pasado fin de semana, hoy no es un día como para confiarse respecto a la meteorología, especialmente en las islas de La Palma y El Hierro, donde el Gobierno de Canarias activó desde anoche una alerta ante la previsión de unas lluvias que pueden ser tan fuertes que no se descarta que terminen llegando en forma de tormenta.
El riesgo es particularmente importante por lo que respecta a la Isla Bonita, dado que tales precipitaciones pueden movilizar las cenizas acumuladas en las zonas afectadas por la reciente erupción volcánica y provocar flujos de lodo a través de la pendiente natural del terreno. En concreto, las autoridades recomiendan a la población palmera que hoy evite caminar por barrancos, vaguadas o cauces, tanto naturales como artificiales, y si alguna persona se ve sorprendida por una escorrentía o flujo de lodo, lo mejor es resguardarse en un lugar alto.
No en balde, los desprendimientos son un suceso harto conocido en La Palma, a tal punto que a las tres de la tarde de ayer mismo se produjo uno a la altura del kilómetro 27 de la LP-4, dentro del término municipal de Puntallana. Aunque no se ha confirmado que fuera provocado por las precipitaciones que, aunque débiles, ya se produjeron en varios puntos de las Islas, todo apunta a que así sea. Personal de Mantenimiento de Carreteras y la Guardia Civil se encargaron de regular el tráfico y devolver la normalidad a la vía en cuestión sin que se produjeran más incidentes que el derrumbe comentado.
No solo los residentes de La Palma y El Hierro deben prevenirse ante esas lluvias fuertes e incluso tormentas, por cuanto la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) también ha elevado avisos para las mismas ante la previsión de fuertes vientos, a la par que ha hecho lo propio por ambas causas respecto a Tenerife, La Gomera y Gran Canaria. Tales previsiones de los expertos detallan que lo peor se espera desde primera hora de la madrugada en las islas más occidentales de la provincia tinerfeña y que, a medida que avance la misma, se extienda al resto de las mencionadas y se prolonguen hasta la caída de la noche. Curiosamente, las temperaturas no solo no bajarán, sino que se espera suban en las cumbres del Archipiélago.
En cuanto a lo sucedido ayer, fue una jornada tranquila respecto a lo meteorológico por mucho que fuera bienvenida la fina lluvia que cayó en algunos momentos del día en la provincia occidental, registrándose la mayor acumulación de las mismas (aunque con cifras modestas) en los medidores situados en la zona de Los Rodeos.
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