A la casa de Valle de Guerra, proclamada como la más navideña de Tenerife hace unos días, se suman otras, cada una con su toque especial.
Después de que DIARIO DE AVISOS anunciara la espectacular decoración navideña que Lorenzo elabora cada año en su vivienda en Valle Guerra, varios tinerfeños han querido hacer alarde de sus apuestas ornamentales en esta época festiva.
Valle de Guerra
Más de 25.000 bombillas, cascanueces de más de dos metros y un Papá Noel de 1,80 adornan la casa más navideña de Tenerife. Es fruto de la imaginación y los sueños de Lorenzo Barroso y su hijo, también llamado Lorenzo. Su padre falleció recientemente, ahora el hijo no solo mantiene la tradición familiar, sino que intenta que la misma crezca año a año.
En 1995 esta familia comenzó a adornar su casa, ubicada en Valle de Guerra, de manera especial. “Con el paso de los años se empezó a correr la voz hasta convertirse en lo que es a día de hoy: una verdadera tradición”, señala Lorenzo.
El Cardonal
Carlos Adrián quiso sumar su edificio, ubicado en El Cardonal, al listado de las mejores casas navideñas de Tenerife, por ello, ha compartido con DIARIO DE AVISOS algunos aspectos curiosos y varias fotografías.
Como iniciativa propia, cada Navidad decora la fachada de su bloque de cuatro pisos de altura. Comenzó hace cuatro años con algunas luces, pero este año ha querido superarse, y lo ha conseguido, pues ha añadido unas 19.000 bombillas, que unidas a las de años anteriores suman unas 25.000, “casi un kilómetro y medio de luces”.
Él solo se encarga de decorar tanto la fachada como las zonas exteriores, adornando árboles y jardines. La decoración incluye unas figuras de los Reyes Magos, un adorno que pone “Feliz Navidad” hecho por él mismo, un árbol de Navidad elaborado con cañas, así como un belén que ha montado en uno de los jardines.
Güímar
En Güímar hay una casa cuya fachada también llama la atención. Cascanueces, regalos o calcetines son algunos de los elementos decorativos propios de las fechas que cuelgan de las paredes.
Al caer la noche, la iluminación de la misma hace digno el alto en el camino para todos aquellos que quieran sacar una fotografía e incluso acudir con los más pequeños.
La Matanza
Desde La Matanza de Acentejo, en el norte de Tenerife, Ezequiel también ha querido enseñar la decoración de su casa. Cuenta con un iluminado muy llamativo, en el que resaltan las cascadas de luces, un Papá Noel, un muñeco de nieve y un árbol de Navidad que mide cuatro metros de altura.
Ezequiel cuenta a DIARIO DE AVISOS que comienzan a colocar los adornos desde finales de noviembre y que cada año tratan de añadir algo nuevo, “adaptado a luces LED de bajo consumo”. Además, el belén que elaboran suele ser un gran reclamo y “será retomado el próximo año, tras un parón de tres”, así que habrá que estar pendientes para no perdérselo.