Una vez más, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado han dado muestras de su eficiencia y coordinación. Conjuntamente, Vigilancia Aduanera, Policía Nacional y Guardia Civil han asestado otro duro golpe al narcotráfico con el abordaje e interceptación de un superalijo de cocaína que viajaba desde Sudamérica a Europa y que, como es sabido desde hace décadas, de una u otra manera terminan pasando por aguas de Canarias o cercanas al Archipiélago.
En esta ocasión, han sido aproximadamente nada menos que unos 3.000 kilos de cocaína los que han sido aprehendidos en el interior de un carguero, que fue abordado por las autoridades cuando navegaba por la transitada ruta comercial del noroccidente africano.
El mercante en cuestión, de nombre Blume y con bandera de Togo (seguramente de conveniencia), fue conducido durante la mañana de ayer al puerto de Santa Cruz de Tenerife, en cuya Dársena de Cabo Llanos atracó tras ser escoltado, para, posteriormente, proceder a un exhaustivo registro de su interior, gracias al cual se confirmaron las sospechas que motivaron esta operación y así descubrir el referido alijo de la aludida sustancia estupefaciente.
Aunque el balance oficial seguramente será facilitado hoy, fuentes de la investigación ya confirmaron anoche a DIARIO DE AVISOS los datos más relevantes, como son esas tres toneladas de droga y el arresto de unas 15 personas, si bien se desconoce aún con certeza si se trata solo de los integrantes de la tripulación del citado carguero o si también hay detenciones en otros lugares a cuenta del operativo.
Sea como fuere, sí que consta fehacientemente que el Blume zarpó el pasado 8 de diciembre de Santos (Brasil) y que tenía previsto (al menos oficialmente) llegar a Riga (Letonia) el próximo 14 de febrero, pese a lo cual se desvió hacia la ruta comercial del noroeste africano, utilizada desde hace más de una década por el narcotráfico para camuflar, dado lo transitado de la misma, su ilegal mercancía, como ya alertaba desde 2009 la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc).
Esta opción de los narcos llegó tras decaer la de los veleros solitarios que hacían escala en Canarias ante la contundente respuesta de las autoridades españolas, que los interceptaron masivamente a finales del siglo pasado y principios del actual.
Se trata del segundo cargamento de la misma cantidad en apenas un mes
A pesar de que Canarias, por su posición geográfica, es tristemente una de las principales zonas de tránsito a Europa del tráfico de cocaína procedente de Sudamérica, no es nada habitual que, en apenas un mes, se haya logrado interceptar un alijo de tales dimensiones como suponen tres toneladas de cocaína, una cantidad que, después de ser mezclada por los traficantes locales, puede suponer en el mercado ilegal como mínimo unos 150 millones de euros.
Pero lo cierto es que hace exactamente un mes las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado también interceptaron otro pesquero, que, con una cantidad similar de la misma droga, navegaba al norte de Canarias rumbo a Galicia.
Pesqueros
De los 16 detenidos entonces, la magistrada del Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo decretó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza de los tres detenidos en Tenerife que iban en ese pesquero, después de que prestaran declaración de forma telemática desde las Islas.
Los responsables de tan importante remesa de cocaína pertenecen a una organización criminal asentada en Galicia especializada en la introducción de grandes cantidades de estupefacientes en territorio nacional, utilizando para ello barcos que simulaban campañas de pesca en aguas del océano Atlántico, próximas a costas africanas.
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