Agentes de la Policía Nacional detuvieron a un varón poco antes del mediodía del pasado martes en un servicio prestado que no estuvo de exento de riesgo para los funcionarios públicos, dado que el ahora arrestado presentó resistencia a la acción de la autoridades en un estado de enorme excitación, a tal punto que hubo que reducirle y acabó engrilletado en una camilla.
Los hechos tuvieron lugar durante la mañana del pasado martes en la transitada avenida de La Trinidad, si bien hay constancia de que ya había provocado un altercado anteriormente en la Catedral, de donde al parecer tuvo que hacerle frente un sacristán.