carnaval santa cruz 2023

Trapaseros hace historia: el primer premio se va al Norte por primera vez

Trapaseros gana el concurso de murgas adultas seguido de Diablos Locos, Bambones y Burlonas, que entra en el podio murguero tras 11 años en el carnaval

La final fue una línea recta en la que pocas murgas supieron destacar. Aunque el nivel no fue especialmente bajo, lo cierto es que a las murgas les costó enamorar y, llegado el final de la noche, el máximo galardón era una lotería en el que cabían, como mínimo, cuatro nombres. Finalmente, el primero de interpretación fue para Trapaseros, un hecho histórico, ya que nunca antes una murga del norte había conseguido tal distinción en el concurso de Santa Cruz. Los de Los Realejos marcaron el nivel de la final y nadie consiguió superarles. Tras ellos Diablos Locos y Bambones, dos murgas enigmáticas. El accésit recayó en Burlonas, que entró en el podio murguero tras 11 años intentándolo.

En el apartado de presentación Mamelucos coronó con un diseño de Josué Quevedo, que también obtuvo el segundo de la mano de Bambones. El tercero fue para Diablos Locos con un diseño de Lito Díaz y Moisés Rodríguez. El accésit recayó en Ni Muchas Ni Pocas.

Entre los premios no oficiales se encuentran el Premio la sonrisa de un niño, que otorgó la Infantilmónica Triqui – Traquitos a la murga infantil Guachipandyuzy y el premio Aday Rodríguez que otorgó la murga infantil Lenguas Largas a Los Bambones. También se entregaron el premio Bolodia de Las Diabólicas a Álex Pescado, de Diablos Locos; El reconocimiento Samuel Armas, de Chinchosos, recayó en Silvestre Pérez de Mamelucos.

La entrega de no oficiales siguió con el premio al mejor presidente, de Los Trabachones, que fue a para Juan Padilla; El premio Jorge González Palmero a la mejor percusión de los Trabachones fue a Aythami de Burlonas; El premio Factoría de Carnaval a murguero del año para Adonay Hormiga; El premio Borja Reyes al mejor director artístico recayó en Ángel Cabrera, director de la infantil Castorcitos; Por último, el premio Tom Carby, que entrega Diablos Locos recayó en Diablos Locos. También se otorgó el reconocimiento por parte del Ayuntamiento a la Ni Pico Ni Corto por sus 50 años.

Trapaseros (1991)

Con la puntuación más alta de las fases pasaron en primera posición a la final y el destino quiso que también actuasen en primera posición, siendo encargados de romper el hielo y marcar el nivel. Arrolladores en la noche del miércoles, los de Los Realejos se presentaron en la final sonando como un cañón en su presentación y pasacalles, dispuestos a repetir en lo más alto.

El circo del sol fue la primera y única apuesta de los del Norte en esta final exprés. Acróbatas delante de la murga y una carpa cirquense en la parte trasera del escenario para presentar, lo que parece, todo un espectáculo de voces, escenografía y letras. Trapecistas, payasos y animales en sus puestos para dar paso a la crítica, para la que utilizaron los diferentes elementos del circo: “somos equilibristas, aquí en Canarias la cosa está jodida”. Siguieron criticando las bases del concurso para pasar a presentar al lanza cuchillos, Enrique Camacho, “apuñalas a los grupos y los humillas”.

Siguió el tema con los leones y el domador, que compararon con la clase política para criticar la pobreza en Canarias, los impuestos y la corrupción: “Son unos vendidos y unos miserables”. Continuaron poniéndose en la mirada de un niño para homenajear a los payasos solidarios de los hospitales, pedir derechos para los animales y criticar la situación de los canarios: “los malabares de una familia cualquiera para llenar la nevera”.
Todo hacía prever que habían terminado cuando, tras una ovación del público, hicieron el truco final: ilusionismo como colofón final para algo que ya era inmejorable. Lo consiguieron: un componente desapareció para plantarse en las gradas delante de los políticos y cantarles su opinión.

Pletóricos. Si este va a ser el nivel de la final nos viene una noche estelar para las murgas. Perfectos en voces, potencia e intención. Con una letra cuidada, un espectáculo colosal y una crítica bien hilada. Han firmado su mejor actuación en años conectando con el público y haciéndolo disfrutar con cada estrofa.

Mamelucos (1980)

Ovación para recibir a Mamelucos tras la presentación de Alexis Hernández, que recordó a la afición que esta noche estarán dirigidos por Samuel Fumero tras el despido inminente de Airam Bazzochi en el día de ayer. Solo en su entrada se hizo notar que a la murga el bache le ha servido para una cosa: engrandecerse, y es que juntos somos más.

A todo dios preguntando y con el interrogatorio dando fue la propuesta de los de la Casa del Miedo en la noche de hoy. Comenzaron con los canariones y sus murgas: “Para tener este arte en Tenerife tienes que nacer”, para seguir con la corporación municipal a la que criticaron duramente. Cabello fue el primero en recoger las duras palabras de Mamelucos: “Dejaste las infantiles a un tema sabiendo que era el fin de la cantera”. Tras el concejal de Fiestas, Bermúdez -que no se encontraba en este punto en el Recinto Ferial-, al que criticaron por el Museo Rodin.

El tema continuó con una crítica a los elevados precios de las cantinas del Recinto, pero entonces llegó el turno de hacer humor utilizando a los miembros del jurado, a los que preguntaron datos sobre las murgas: “¿Quién dirigía a Diablos Locos 30 años atrás?” y pedirles que cantaran con ellos los diferentes pasacalles. Concluyeron poniendo el foco en el público e interrogándolo para criticar la violencia de género, las listas de espera para atención en salud mental, la explotación laboral, la inflación o la homofobia: “Nuestra gente es la que tiene la respuesta”.

Mejoraron el nivel de su fase y conectaron en partes con el público. Seguir la estela de Trapaseros se les tornó difícil, pero firmaron una buena actuación, más si cabe teniendo en cuenta la situación interna de los de la Casa del Miedo.

Zeta – Zetas (2003)

La murga 3D se presentó, como ya hizo en su fase, como la Organización de Murgas Unidas. Cuando todo indicaba que la entrada sería igual, enchufaron el bajo y las guitarras eléctricas para, con solista incluido, sorprender al público rindiendo tributo al rock and Roll al ritmo de Highway to hell.

El show y el humor, que ha brillado por su ausencia este año, se abrió paso tras su pasacalles de la mano de Brito, que presentó el scaperoom particular de Zeta – Zetas, un hilo conductor que casualmente ya tocó Pita – Pitos en las murgas infantiles este año. Instrucciones dadas y presentadas las 3 habitaciones que había que superar, comenzó su tema. La primera habitación de la que tuvo que escapar ZZ fue el Parlamento de Canarias. Para conseguirlo el público debía gritar la palabra correcta entre las que presentaron sobre el escenario: “sueldos” y “huevos”. Siguieron criticando a los parlamentarios por el sobregasto en mascarillas o la corrupción.

La segunda habitación fue el Loro Parque. Para salir invitaron al público a gritar el final de sus palabras, rescatando el recurso usado por Bambones en Escuelita Murguera en 2003 para pedir libertad para los animales y criticar: “Cacique de mierda, no pegaré en mi coche tu pegatina”. La última habitación fue el Recinto Ferial. Hicieron levantar al público para buscar las pistas que les llevaban a la salida. Terminaron encontrando números, que utilizaron para hilar la canción final, con la que criticaron el concurso, al propio carnaval y la gestión del Ayuntamiento: “les pongo un 0”. Concluyeron desalojando a los políticos de su grada para sentar a murgueros y decirle a los concejales: “Nuestra es la final”.

Pasada la fiebre de las luces y la realidad virtual, Zeta Zetas volvió a ser murga. Con una letra bien hilada y estructurada en la que fueron introduciendo críticas, consiguieron una actuación lineal, aunque con un final que levantó al Recinto entero, y no porque lo hubiesen pedido, sino porque el gesto de desalojar la grada de los políticos emocionó.

Desbocados (2006)

No habían pasado dos horas del inicio de Trapaseros cuando subió Desbocados al escenario, cuartos en actuar en esta final galopante, que deja poco margen al cansancio. Los de Juani Padilla comenzaron, como en la fase, homenajeando al carnaval en su entrada, y entonces su pasacalles volvió a sonar en una final de murgas con fuerza.

La madre de Hugo, joven que tuvo un accidente en el mar que lo dejó tetrapléjico, subió a reivindicar, como ha hecho en varias ocasiones, una vivienda digna para Hugo y ella que les permita volver a su isla natal. Entonces comenzó su tema, No es lo mismo una bulla que un escrache”, en el que empezaron pidiendo al público que silbase a los políticos presentes en el Recinto. Siguió entonces el homenaje que empezó Zeta – Zetas a la Escuelita murguera de Bambones, esta vez con la melodía original, para pedir al público que abuchease o festejase los temas candentes que fueron tocando: “¿Qué isla es mejor Tenerife o Las Palmas?”, “¿Rajazo a los políticos o abrazo a los palmeros?” o “Paulino y Concepción, el mismo tranque son”.

Continuaron homenajeando a los activistas, los estudiantes y los palmeros para terminar su tema criticando la violencia de género y defendiendo los derechos de la mujer: “Ya está bien de machistas”. Llegó la despedida, pero antes pidieron a Ni Muchas Ni Pocas que subiera a cantarla con ellos por el fallo de sonido que sufrieron ellas en la tercera fase.

Intentaron brillar, y aunque no lo consiguieron ni interactuando con el público, lo cierto es que hicieron que las gradas respondieran y pasasen un buen rato junto a ellos. Reivindicación y diversión a partes iguales.

Diablos Locos (1970)

¿Rematarán los trónicos la jugada de la fase? Todo se verá. Lo que está claro es que tienen el Recinto en su bolsillo, y eso que solo están dando los tonos de su entrada, en la que criticaron el negocio y la especulación en el carnaval. Entonces llegó otro himno murguero al templo habilitado para Don Carnal, su pasacalles.

En los exteriores del Recinto Ferial un reportero comenzó retando a un componente a subir al escenario desnudo para presentar su tema, Hoy nos retamos, y empezó el espectáculo y el humor. Hicieron levantar a los políticos para comenzar a criticar que entren “sin colas y sin pagar” y desalojarlos de las gradas para seguir su crítica, un efecto que no levantó tanto público puesto que Zeta – Zetas lo hizo horas antes. Continuaron pidiendo al público que cogiese los pitos que habían colocado previamente bajo los asientos para homenajear los pitos y las trompetas en las murgas al ritmo de El Cubanito: “Si desprecias a mi amiga, eres todo menos murgas”.

El siguiente reto para la murga fue convertirse en mujeres. Para ello, las Triquikonas por completo sobre el escenario tras tres años fuera del concurso para homenajear su trayectoria y despedirlas con honores, cantando su archiconocido pasacalles en el frontal del escenario. El siguiente reto de Diablos Locos fue desnudarse por completo, y tras apagar las luces, en 3 segundos se encontraban en ropa interior, ellos, y su afición. El último fue un reto a Alfonso Cabello para criticar su gestión:“El dueño del carnaval no eres tú”. Concluyeron: “Alfonso yo te reto a que te mandes a mudar, te queda grande el carnaval”.

Apunta a la luna, y si fallas al menos estarás entre las estrellas. Más o menos así les sucedió a los trónicos, que podrían haber reventado el concurso pasado el ecuador de la final, pero no llegaron a hacerlo por completo. Dieron murga para rato, tuvieron una gran actuación y el público respondió ¿será suficiente?

Bambones (1982)

Homenaje incluido en la presentación de Alexis Hernández a los de El Cardonal, tal y como él los presenta, “la murga que roba corazones”, comenzó la actuación de Bambones en su 40 aniversario con la segunda parte de su entrada de sus 20 años, que cantaron allá por 2003. Emoción en estado puro sonando como un cañón mientras recuerdan las fantasías que han lucido los últimos 20 años. Bonito. “Y llegó el 2023 mami”, y con él su pasacalles.

Sí, somos los del no, fue la apuesta de los de Primi Rodríguez, y también la única ocasión de convencer al jurado y lo más importante, al público. Comenzaron homenajeándose a ellos mismos y su estilo: “Esos vividores dicen no a Canarias, que está vendida”. Ironizaron entonces con las veces que han dicho que no en su vida, y en ese momento comenzaron a gritar no al unísono con el público: Zerolo metió la ma(no), Bermúdez es un ena(no).

Siguió la canción con una crítica a Pedro Martín y el Cabildo por la propuesta del nuevo estadio, el puerto de Fonsalía y el circuito de fórmula 1, para tildarlo de “pelotazos”. Comenzaron entonces a negarse a cada propuesta del Cabildo: “Soy del no porque no haces nada”. De ahí a un no rotundo al carnaval de día, el escenario de este año, al despilfarro, a la pérdida de tradiciones y a Alfonso Cabello: “Lo mejor pal carnaval es que se marche por inepto y por cobarde”. Dieron paso entonces al no al cemento para homenajear a los activistas que pararon Cuna del Alma y criticar la explotación turística de las islas: “Aquí quedan solo la miseria y la precariedad”. Terminaron el tema concluyendo: “No está en venta nuestra identidad, nuestra dignidad, nuestra libertad”.

Catedráticos en letra murguera demostraron una vez más que no hay quien les gane cuando cogen un bolígrafo y un papel. Aunque su tema quizá pecó de denso para una final en la que hasta ahora la letra estaba escondida tras el espectáculo, lo cierto es que, con voces impecables y potencia, fueron una murga con mayúsculas, sin florituras, sin adornos, murga, de las que canta verdades y remueve consciencias, aunque pueda no ser lo que quiere el público en 2023.

Burlonas (2012)

“Ser burlona es lo mejor” canta la murga, y se equivocan, tener a Burlonas de nuevo en una final es lo mejor, y que sea para siempre. La femenina por excelencia en la actualidad, se presentó con Adela Peña al frente para demostrar que, desde hace años, las murgas femeninas tienen hueco en el podio murguero.

En su propuesta para la final comenzaron reconociendo que no saben qué hacer para conseguir ganar un premio de interpretación, lo que utilizaron para contextualizar su tema. Presentaciones hechas, las Burlonas aparecieron caracterizadas de loro para recordar la entrada de los Mamelucos de 2018, criticar la gestión de Bermúdez y el no haber respetado la ley de Memoria Histórica. Siguieron con una retahíla al estilo Bambones para criticar las fiestas que “pagan los ciudadanos con impuestas”. El siguiente recuerdo que evocó Burlonas fue las luces de Zeta – Zetas, y a golpe de solo por parte de una de sus componentes comenzó la crítica dura, sello de la casa, al abandono de los barrios por parte de Bermúdez: “existen ciudadanos de segunda y de primera”.

Entonces rescataron La Fasnia de Diablos Locos, y al ritmo de Mami, que será lo que quiere el negro llegó el rajazo a Alfonso Cabello, su trato a los grupos y la falta de actuaciones en la calle: “parece que las murgas molestamos al alcalde”. Concluyeron reconociendo que vienen a concursar y que quieren ganar criticando al alcalde, siendo letra y defendiendo al pueblo: “Mi premio es ganar con mi identidad”.

Vinieron buscando un premio, y habría que estar loco para no cumplir su petición. Con ingenio rescataron varias actuaciones de otras murgas ganadoras en años anteriores para deleitar al público y hacerlo vibrar sirviendo crítica de primero, crítica de segundo y crítica de postre. Firmaron su mejor actuación en una final y catapultaron su nombre hasta lo más alto. Colosales e históricas conectaron y enamoraron.

Triqui – Traques (1968)

Doble reto para la tribu más carnavalera: ser últimos y haber actuado después de Bambones y Burlonas. Siendo objetivos, ni el pasacalles les puede ayudar a conseguirlo, pero en esta final tan extraña y abierta ¿quién sabe?

En su tema, llegó el humor y el show que tanto se echó de menos en la fase, en un nuevo intento por volver a los Triquis de Las posesas. Los movimientos y la intención están, el humor no vino con ellos. Intentaron hacer humor con la vestimenta que llevaban de traperos y rescatando canciones del presente como la combi completa y formas de presentar las canciones de las orquestas, para hacer una comparación de cuál de los dos grupos liga más.

Siguió el pique entre los hombres del reguetón y los de la orquesta. Los primeros explicaron al público cómo se debe hablar para triunfar en la industria musical. Concluyó la canción homenajeando la historia del carnaval, a Tom Carby, Mamá Lala y muchos más murgueros que ya no están: “Solo nos queda darte las gracias”.

Si pasar a la final ya fue todo un premio para ellos, que el público aguantase en las sillas hasta el final de su actuación fue todo un regalo. Una vez más intentaron rescatar a unos Triqui – Traques que por desgracia ya no existen. ¿Lo mejor? Su pasacalles y despedida. Acabó la final y ahora, solo quedan los premios.

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