El canario Juan José Cuco Afonso lleva más de tres décadas en el ámbito teatral en Madrid, pero continúa dirigiendo proyectos en el Archipiélago. En esto momentos, está disfrutando de la dirección de la obra Un día habrá una isla, con texto teatral de los dramaturgos canarios Quique y Yeray Bazo (QY Bazo), un homenaje al periodista y poeta, nacido en La Gomera, Pedro García Cabrera, figura histórica que forma parte de la literatura en español y que perteneció a la Generación del 27. Cuco llegó a conocer al poeta, un encuentro breve pero en el que recibió un fuerte impacto emocional, tanto por su personalidad como por su obra. Juan José Afonso relata algunos detalles de aquel momento y del espectáculo que se representará este sábado, 4 de marzo, a las 20.30 horas, en el Teatro Guimerá de Santa Cruz de Tenerife.
Con la producción de Cauproges, el elenco está compuesto por Bárbara Espejo, Niria Ró, María Salazar, Norberto Trujillo y Jorge Yumar. Toda la información sobre esta propuesta cultural puede encontrarse en el sitio web www.undiahabraunaisla.com.
Las entradas están a la venta, tanto en la web del Teatro Guimerá como en su taquilla. El Organismo Autónomo de Cultura de Santa Cruz de Tenerife, a través del Teatro Guimerá, ha coproducido este espectáculo, que cuenta con la colaboración de la Fundación Pedro García Cabrera, la Fundación CajaCanarias, la Asociación Cultural Silbo Gomero, Itahisa Darias Sánchez y Escuela de Arte y Superior de Diseño Fernando Estévez; y la financiación del Ayuntamiento de Vallehermoso (La Gomera), el Cabildo de Tenerife y el Gobierno autonómico s a través del Instituto Canario de Desarrollo Cultural.
-¿Cómo definiría el texto que QY Bazo han escrito para ‘Un día habrá una isla’ y cómo se enfrenta a la dirección de una obra tan singular?
“El texto de QY Bazo es más un poema escénico que una pieza teatral al uso. Es muy diferente a casi todo lo que he dirigido y enfrentarme al texto ha supuesto un importante reto”.
-Usted tuvo la suerte de conocer a Pedro García Cabrera. ¿Cómo fue aquel encuentro?
“Pues la verdad es que mi encuentro con el maestro fue breve, pero muy intenso, en un acto cultural en La Guancha. Allí, en una fría tarde, le conocí junto a su mujer, Matilde, y recibí un fuerte impacto emocional por su personalidad y por su poesía, que no conocía. Era un hombre de personalidad hipnótica, que rezumaba bondad y sabiduría, amigo de Esteban Dorta, poeta local a quien le dedicó alguno de sus poemas. Me encanta tener la posibilidad ahora de rendirle este homenaje a través del teatro, que tanto amaba”.
-¿Cuál cree que es la vigencia de una personalidad como Pedro García Cabrera en los tiempos actuales?
“Para mí tiene una total vigencia, sobre todo por ser un hombre ecuánime, honesto y preocupado por los acontecimientos del momento que le tocó vivir. García Cabrera estaba comprometido con su arte y la utópica creación de un arte nuevo, que ayudara al hombre a enfrentarse a la dureza del día a día”.
-¿Cómo está siendo su experiencia con el elenco de la obra, formado por actrices y actores emergentes?
“Una aventura extraordinaria que me llena plenamente, al observar una entrega total al proyecto y una profesionalidad admirable”.
-¿Cuáles considera que son los elementos más atractivos de la obra, por los que el público debe acudir a verla?
“Acercarse al mundo poético de Pedro García Cabrera y, a través de él, realizar una inmersión en los momentos más destacados de su vida, que es ejemplar en una época negra y triste de nuestra historia. El sufrimiento de nuestros antepasados directos nos ha llevado a tener la vida en democracia que ahora podemos disfrutar. Las jóvenes generaciones deben saber que lo que tenemos está construido a base de sufrimiento y sangre de nuestros familiares directos”.
-En los últimos años ha fortalecido su presencia en Canarias con varios montajes, tras muchísimos años trabajando en Madrid, ¿qué ofrecen las Islas a un director escénico con tanta trayectoria a nivel nacional?
“La posibilidad de dirigir en mi tierra a estas alturas me llena de gozo. Lo estoy disfrutando mucho, la verdad”.
Juan José Pérez Afonso comenzó sus incursiones en las artes escénicas en los años 70, formando parte de la compañía independiente canaria Tibicena. En 1982 cofundó la compañía Sanborombón Teatro. De la mano de José Carlos Plaza y la compañía de Concha Velasco, se instaló en Madrid en 1988 y, desde entonces, ha dirigido multitud de obras escénicas nacionales, además de compatibilizar la dirección teatral con la gestión y programación de los teatros Príncipe Gran Vía y Marquina, en Madrid, ya en el siglo XXI. Cuco Afonso ha dirigido obras protagonizadas por actores como Emilio Gutiérrez Caba, Gabino Diego, Manuel Alexandre, Carmen Machi, Carmelo Gómez o Ana Belén. Recibió en 1998 el Premio Ercilla a la mejor producción por La Tragedia del Rey Ricardo III.