tecnología

Un primer país de Europa prohíbe el uso de ChatGPT

El bloqueo se mantendrá hasta que ChatGPT "no respete la disciplina de la privacidad"
Un primer país de Europa prohíbe el uso de ChatGPT

El gobierno italiano ha tomado la decisión de bloquear de manera inmediata el popular ChatGPT de la tecnológica estadounidense OpenAI, alegando que no respeta la ley de protección de datos de los consumidores. Según el garante italiano para la Protección de Datos Personales, la herramienta ha sufrido una pérdida de datos sobre sus usuarios y los datos de pago de sus abonados el pasado 20 de marzo. Además, se destaca la falta de información a usuarios y a todos los interesados de quienes recoge datos OpenAI y la ausencia de una base jurídica que justifique la recogida y conservación masiva de datos personales.

La Unesco ha hecho un llamado urgente a los países para que apliquen sin demora el Marco Ético Mundial sobre inteligencia artificial, adoptado en 2021 por los 193 Estados miembros. Este marco ético busca regular el uso de la inteligencia artificial para garantizar su seguridad, confiabilidad, privacidad y respeto a los derechos humanos.

ChatGPT, el chat más conocido de la emergente inteligencia artificial, es capaz de simular conversaciones humanas. Sin embargo, según el organismo italiano, las informaciones generadas por ChatGPT no siempre corresponden a la realidad, lo que plantea dudas sobre su fiabilidad. Además, se destaca la ausencia de un filtro para verificar la edad de sus usuarios, lo que expone a los niños a respuestas no adecuadas para su nivel de desarrollo y conciencia.

El uso de la inteligencia artificial cada vez es más frecuente y pujante en todo el mundo, lo que ha generado preocupaciones sobre su regulación y su impacto en la privacidad y los derechos humanos. Varios países han tomado medidas para regular su uso y garantizar su seguridad y confiabilidad.

Por su parte, OpenAI ha recibido críticas de varias organizaciones por su experimentación con la inteligencia artificial. Es necesario que las empresas que trabajan con esta tecnología respeten la ley y protejan los datos personales de sus usuarios para garantizar la privacidad y seguridad de los mismos. Además, es importante que se establezcan medidas de control y regulación para garantizar el uso ético y responsable de la inteligencia artificial en beneficio de la sociedad en su conjunto.

TE PUEDE INTERESAR