El Día Mundial de la Concienciación sobre el Autismo, que se conmemora mañana, llama la atención sobre los derechos de las personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA) y tiene como objetivo concienciar sobre la comprensión y aceptación de la neurodiversidad. La Asociación Canaria del Trastorno del Espectro del Autismo (Apanate) organizó un acto en su Espacio Autismo en La Laguna, un evento en el que participaron personas con autismo, familiares, autoridades y colaboradores.
El trastorno del espectro del autismo es una condición que afecta a la forma de pensar y comportarse, a la comunicación y la interacción con los demás. Una de cada 100 personas en España lo presenta. El lema elegido para la campaña de este año, Llamémoslo por su nombre, simboliza un infinito por el autismo. El manifiesto de este 2023 pone el foco en tres ejes: la variabilidad dentro del espectro del autismo; la especificidad de la condición y el orgullo de pertenencia, esenciales para mejorar la calidad de vida de las personas autistas y sus familias, y la promoción de la igualdad de oportunidades para el colectivo.
Cada persona con autismo es diferente por las características de su propio autismo, las necesidades de apoyo que pueda presentar, el nivel de lenguaje y la capacidad intelectual que tenga, su personalidad, sus intereses, sus sueños y sus metas. Aunque compartan diagnóstico, cada persona es única, y así, la personalización y la individualización son aspectos imprescindibles a la hora de apoyar a las personas y a sus familias. El colectivo defiende su derecho a ser respetado y a tomar sus propias decisiones, aunque puedan necesitar apoyo. Y no ser excluidos, marginados o agredidos por su condición.
acto de apAnate
En ese esfuerzo por visibilizar y concienciar, el acto de Apanate estuvo protagonizado por diversas personas con autismo y sus familias, quienes compartieron sus vivencias. El evento estuvo conducido por personas con autismo de diferentes edades y perfiles.
Apanate lleva más de 27 años dedicados a las personas con autismo y sus familias. Cuenta con más de diez servicios especializados para acompañar a personas con TEA de todas las edades y perfiles, de forma personalizada y bajo modelos avalados por la ciencia y la ética.
En representación de las más de 200 familias que forman Apanate, un grupo de progenitores pidieron a las administraciones “una Atención Temprana de verdad”, pues “es un tiempo perdido para poder comenzar a tener una evolución”. También exigieron más plazas en los centros para sus hijos y para que todos los padres y madres que los tienen en casa “puedan tener un apoyo”. Además, solicitaron un “apoyo económico sin incertidumbre” para que organizaciones como Apanate “puedan seguir desarrollando sus importantes actividades con normalidad” y el “impulso a programas formativos y Aulas Enclave”. Se puso énfasis en “la salud mental para las personas con autismo y sus familias” y una “mayor coordinación entre Sanidad, Educación, Asuntos Sociales y Asociaciones”. “Ni me guiaron, ni encontré acompañamiento ni respuestas”, recalcan.
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