Son una minoría, pero ruidosa y sumamente molesta. En ocasiones, como el caso que nos ocupa, con actitudes intolerables. Un pasajero de un vuelo a Tenerife que salió desde Escocia ha sido vetado de por vida por Jet2 después de que protagonizara un escándalo a bordo, en el que llegó a orinar en la cabina del avión. El vuelo tuvo que ser desviado a Faro, en Portugal.
A Eric Forrest, de 55 años, se le prohibió de por vida volar con la aerolínea Jet2, que amenaza con demandarlo por los costos sufridos tras “alterar gravemente” el orden en un vuelo que salió desde Glasgow con destino Tenerife Sur. “Fue agresivo, consumió alcohol ilícitamente, intimidó a otros clientes, se sospecha que pudo consumir drogas y orinó en la cabina”, según la propia aerolínea.
El avión salió de Glasgow con destino Tenerife Sur y, tras ser desviado a Faro, tuvo que esperar allí, primero para que la policía se llevara al hombre y luego para poder limpiar a fondo la moqueta. “Los pasajeros, al final, tardaron 24 horas más en llegar a su destino”, informó el director gerente de Jet2, Phil Ward, que pidió “disculpas a todos los pasajeros y trabajadores”.
Ahora, por lo ocurrido en ese vuelo a Tenerife, la compañía espera “una compensación económica” por lo hecho por Eric Forrest: “Perseguiremos enérgicamente al Sr. Forrest por todos los costos en los que incurrimos como resultado de este desvío, además de vetarlo de por vida. El bienestar de nuestros pasajeros es primordial”.
El hombre no fue arrestado en Portugal, pero se tuvo que quedar en el aeropuerto esperando poder regresar a Escocia. Una vez allí quiso pedir disculpas públicamente: “Es verdad que estaba borracho, pero no oriné en la cabina. Me bebí una botella entera de vodka del duty free. Estaba muy borracho”.
Además, rechazó que el vuelo “estuviera en peligro” por su culpa: “Dijeron que estaba poniendo en peligro el avión, pero no fue así. Derramé vodka, pero no priné”.
Hemeroteca
Publicidad
Esquelas